Giro de película en el caso de la muerte de Matthew Perry. La policía de Los Ángeles ha detenido a cinco personas, entre ellas a dos doctores y a una traficante, en relación con el fallecimiento por sobredosis del protagonista de Friends el 28 de octubre de 2023, a los 54 años. Entre los detenidos están Kenneth Iwamasa, el asistente personal del actor, quien lo encontró inconsciente aquella tarde en el jacuzzi de su residencia angelina, y Jasveen Sangha, conocida como “la reina de la ketamina”. El fiscal federal, Martin Estrada, acusa a este grupo de haber ordeñado al actor miles de dólares para proveerle la droga a pesar de conocer bien los problemas de abuso y adicción de Perry, de los que él mismo hablaba públicamente.
Tal y como se ha conocido este jueves, 15 de agosto, en el centro del escándalo se encuentran dos médicos, Salvador Plasencia y Mark Chávez. De acuerdo a los fiscales, ambos se aprovecharon de la adicción de Perry para enriquecerse vendiéndole ketamina. La ketamina es utilizada en Estados Unidos para tratar la depresión y la ansiedad, pero solamente en clínicas que operan bajo estrictos controles. De acuerdo a las autoridades, Perry desarrolló una dependencia a la vía intravenosa de esta sustancia. Cuando las clínicas locales se negaron a elevarle la dosis, el actor buscó a quienes accedieran a surtirle la ketamina.
Matthew Perry |
“Plasencia y Chávez violaron sus juramentos como médicos de cuidar a sus pacientes. Causaron muchos daños solo para hacer dinero”, ha asegurado este jueves Anne Milgram, directora de la oficina de control de drogas de Estados Undios, la DEA. La funcionaria, la encargada de la lucha antidrogas del país, dijo que los médicos vendían a Perry viales de ketamina por 2.000 dólares, a pesar de que ellos los compraban por 12 dólares la unidad. De acuerdo con el fiscal Estrada, Perry llegó a pagar 55.000 dólares por unos 20 viales.
El fácil acceso a la ketamina solo empeoró la adicción de Perry, quien había lidiado toda su vida con el alcohol y opiáceos para el tratamiento del dolor, como el Vicodin. De acuerdo con Milgram, el actor quería más droga y más rápido mientras empeoraba su condición. Así que recurrió a traficantes para conseguirla e incluso a conocidos, como Erik Fleming, otro de los acusados. La dosis fatal fue provista por Jasveen Sangha, quien mantenía un almacén en el norte de Hollywood listo para servir a Perry con ketamina cuando se la solicitara. “Me pregunto cuánto más va a pagar este imbécil”, escribió el doctor Plasencia a Chávez en un mensaje de texto escrito en septiembre de 2023, un mes antes del fallecimiento del intérprete. “Vamos a averiguarlo”, añadió. Los médicos los borraron tras la muerte accidental por sobredosis de Perry, pero las autoridades federales pudieron recuperarlos de los teléfonos incautados en la investigación.
Las pesquisas arrojaron que los cinco detenidos se referían en sus comunicaciones a la ketamina en código. Le llamaban Dr. Pepper, el nombre de un popular refresco, “latas” o “bots”. Plasencia atendía pacientes en una clínica de Calabasas, una exclusiva comunidad al noroeste de Los Ángeles. Este, según los fiscales, quería convertirse en la única fuente de droga para Perry. “Sabía muy bien que lo que estaba haciendo era peligroso. En una ocasión, inyectó a Perry con ketamina y este se quedó congelado mientras su presión se disparó”, ha señalado Estrada en la conferencia de prensa de este jueves. A pesar de esto, le dejó varios viales a Iwamasa, el asistente, quien no tenía ningún conocimiento médico, para que se los administrara.
El mismo mes de la muerte de Perry, Plasencia comentó a otro paciente que el protagonista de Friends “estaba perdiendo todo control con su adicción” a la ketamina. A pesar de esto, el médico continuó aprovechándose de su paciente más famoso. Cuando este murió, dio a las autoridades informes en los que señalaba que solo le administraba 60 miligramos cada 24 horas. Estos eran documentos falsos. Ese mismo mes, Jasveen Sangha le vendió otros 50 viales de ketamina por 11.000 dólares. “No había forma de que no lo hiciera. No había chance de que no hiciera dinero con esto”, aseguró ese mismo mes Erik Fleming, el mensajero que llevaba la ketamina hasta la casa de Perry en Pacific Palisades.
La policía de Los Ángeles informó el pasado mes de mayo que existía una investigación criminal abierta vinculada con la muerte de Perry. Las detenciones que se han hecho ahora están vinculadas a estas pesquisas, realizadas con ayuda de agentes de la DEA y hasta del servicio postal.
Plascencia se enfrenta una pena máxima de hasta 120 años en prisión y Sangha encara la cadena perpetua por haber suministrado la droga ilegalmente. “Con esto queremos lanzar un mensaje: si estás en el negocio de las drogas ilegales, te llevaremos ante la justicia por las muertes que provocas”, ha señalado el fiscal Estrada en la rueda de prensa.
Múltiples agencias policiales han llevado a cabo registros, incautando ordenadores, teléfonos y otros dispositivos para rastrear cómo llegó la droga a manos de Perry. El actor tenía en el momento de su muerte en su organismo una cantidad de ketamina similar a la que los médicos usan de anestesia general en una operación. El Departamento Médico Forense de Los Ángele determinó en diciembre que se trató de una muerte accidental. La causa fueron “los efectos agudos de la ketamina”, afirmaron los forenses. “Los factores que contribuyeron a la muerte de Perry incluyen ahogamiento, enfermedad de las arterias coronarias y los efectos de la buprenorfina (utilizada para tratar el trastorno por consumo de opioides)”, detallaron.
El actor fue hallado por su asistente, Kenneth Iwamasa, el 28 de octubre de 2023 flotando boca abajo en la piscina de su casa en el exclusivo barrio Pacific Palisades. En un primer momento, su muerte fue tratada como un accidente. Perry había estado recibiendo terapia de infusión de ketamina para la ansiedad y la depresión, pero la última vez había sido una semana y media antes de su fallecimiento y la ketamina tiene una vida media de tres o cuatro horas dentro del organismo, motivo por el que empezó la investigación.
Según confesó el propio actor en su biografía Friends, Lovers, and the Big Terrible Thing (2022), mientras formó parte del elenco de Friends —serie que duró 10 temporadas entre 1994 y 2004— sufrió varios episodios de adicción a las drogas y al alcohol. Su muerte fue impactante para los fans de la serie y también para sus compañeros de reparto; Jennifer Aniston, Courteney Cox, Lisa Kudrow, Matt LeBlanc y David Schwimmer.