A lo largo de su presidencia, Vladímir Putin ha recibido diversos regalos, incluyendo animales que no solo sirvieron como símbolos de la diplomacia y construcción de relaciones internacionales, sino que también enriquecieron su vida personal.
Conocido por su afecto a los animales, el mandatario ha ostentado sus mascotas con orgullo, dejando claro que son más que un simple obsequio y encarnan muestras de respeto y amistad. Aquí les presentamos algunas de las mascotas que han llegado a la vida del presidente ruso.
El último obsequio de este tipo lo hizo el líder de la República Popular Democrática de Corea, Kim Jong-un, quien regaló a Putin dos perros blancos de caza de la raza nacional Pungsan, muy rara y casi desconocida fuera del país asiático, que desciende de una especie de lobos.
Un labrador
En 2000, el entonces ministro de Situaciones de Emergencia ruso, Serguéi Shoigú, regaló a Putin un cachorro de labrador negro. La perrita recibió el nombre de Konni y se convirtió en una fiel acompañante del mandatario durante varias apariciones públicas. Konni vivió 15 años y falleció en 2014.
Un pastor búlgaro
En 2010, el entonces primer ministro de Bulgaria, Boiko Borísov, obsequió a Putin un cachorro de pastor búlgaro (karakachán), raza conocida por su lealtad y habilidades de guardia. El perro, llamado Buffy, simbolizó la amistad y cooperación entre Rusia y Bulgaria.
Akita Inu de Japón
En 2012, el gobernador de la prefectura japonesa de Akita, Norihisa Satake, regaló al mandatario ruso un perro de la raza local Akita Inu. El gesto fue una forma de agradecimiento por la ayuda prestada por Rusia después del devastador terremoto y tsunami que sacudió Japón en 2011.
Un pastor yugoslavo
En 2019, el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, obsequió a Putin un cachorro de pastor yugoslavo. El perro, llamado Pasha, refleja las estrechas relaciones entre Serbia y Rusia
Tigre de Amur
Uno de los regalos más exóticos que ha recibido Putin fue una tigresa de Amur de dos meses, que le regalaron en 2008 con motivo de su cumpleaños. La felina, llamada Masha, fue posteriormente trasladada al parque safari de la ciudad rusa de Gelendzhik, en el sur de país, para asegurar su bienestar y cuidado adecuado.
Dos caballos
En 2000, el entonces gobernador de la provincia rusa de Oriol, Yegor Stróyev, regaló al mandatario un caballo de la raza Orlov, conocido por su resistencia y elegancia. El regalo marcó el inicio de la afición de Putin por la equitación.
En 2005, a la vida del mandatario ruso llegó otro caballo, el poni Vádik, un regalo del entonces presidente de la república rusa de Tatarstán, Mintimer Shaimíev.
Una cabra
En 2003, el entonces alcalde de Moscú, Yuri Luzhkov, obsequió al jefe de Estado una cabra blanca llamada Skazka, que en español significa 'cuento de hadas'. El regalo fue un símbolo del Año Nuevo.
Un alabai
En 2017, el entonces presidente de Turkmenistán, Gurbanguly Berdimuhamedow, regaló a su homólogo ruso por su 65.º cumpleaños un cachorro de alabai, raza de perro pastor de Asia Central, llamado Verny ('Fiel', en español).
Un galgo
En 2019, el entonces presidente de Kirguistán, Sooronbay Jeenbékov, regaló a Putin un cachorro de la rara y valiosa raza kirguisa de galgo, conocida como taigán. Al perro le dieron el nombre de Sherján y la raza es muy preciada y respetada en el país centroasiático por sus habilidades para cazar desde pequeños roedores hasta lobos.
Mikhail Klimentiev / Sputnik