Un bar en Ohio, Estados Unidos, ha generado controversia tras implementar una nueva política que prohíbe la entrada a personas menores de 30 años los fines de semana. La medida, que entró en vigor a principios de este mes, ha sido criticada por algunos clientes que la consideran discriminatoria y excluyente.
El Donerick's Pub, ubicado en Groveport, a unos 20 kilómetros al sur de Columbus, tomó esta decisión tras una pelea que se produjo en el establecimiento durante un fin de semana. Si bien no se ha confirmado la edad de las personas involucradas en el altercado, los propietarios del bar afirman que este tipo de incidentes son más frecuentes cuando hay clientes jóvenes presentes.
"Probaremos diferentes métodos para mantener baja la violencia. No será tolerada", explicaron desde el establecimiento.
Sin embargo, la nueva política ha sido recibida con desaprobación por algunos clientes habituales, quienes lamentan que se les impida disfrutar del bar los fines de semana.
"Tengo 25 años y todos mis amigos tienen menos de 30. Venimos aquí por la buena vibra", dijo uno de ellos. "En este tipo de negocios es inevitable que ocurran incidentes. Necesitan planificar mejor por si las cosas se salen de control", agregó otro cliente.
Otros usuarios en redes sociales han sugerido alternativas a la prohibición total, como elevar la edad mínima de ingreso a 35 años, cambiar al DJ o implementar un código de vestimenta.
La polémica en torno a la política del Donerick's Pub pone de relieve el debate sobre la responsabilidad de los establecimientos públicos en la prevención de la violencia y la búsqueda de un equilibrio entre la seguridad y la inclusión.
Cabe destacar que la discriminación por edad es ilegal en algunos países y estados. En el caso de Estados Unidos, la Ley de Derechos Civiles de 1964 prohíbe la discriminación por motivos de raza, color, religión, sexo y origen nacional. Sin embargo, no existe una ley federal específica que prohíba la discriminación por edad.
Es importante que los propietarios de negocios estén familiarizados con las leyes locales y estatales para evitar incurrir en prácticas discriminatorias.
En este caso particular, el Donerick's Pub podría enfrentar repercusiones legales si se determina que su política discrimina a los clientes menores de 30 años.
Además del aspecto legal, la polémica también podría tener un impacto negativo en la imagen del negocio y en su reputación a largo plazo.
Es importante que los establecimientos públicos encuentren formas de garantizar la seguridad de sus clientes sin recurrir a medidas discriminatorias. La comunicación abierta con los clientes, la implementación de medidas de seguridad adecuadas y la capacitación del personal son algunos aspectos clave para lograr un ambiente seguro e inclusivo para todos.