Un grupo de venezolanos en Islandia protestó este viernes 17 de noviembre contra las deportaciones arbitrarias y el maltrato que sufrieron sus compatriotas deportados desde ese país europeo a Venezuela.
Los manifestantes se concentraron frente a las instalaciones de la oficina de migración en Islandia, al norte de Europa, donde describieron las circunstancias del vuelo charter que deportó a 155 adultos y 25 niños a Venezuela el 15 de noviembre.
Los migrantes denunciaron que fueron detenidos arbitrariamente al regresar a Venezuela a través del Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, estado Vargas.
Una de las migrantes leyó parte de un escrito que señala que hubo presencia de varios cuerpos de seguridad venezolanos, incluyendo al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), funcionarios del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (Inac), la Policía Nacional Bolivariana (PNB), el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) e Interpol.
Los migrantes cuestionaron que activaran a estos cuerpos de seguridad al recordar que se hace cuando se recibe a “personas de alta peligrosidad” y no a migrantes venezolanos que se ven forzados a dejar el país por la crisis política, económica y social que se vive en el territorio nacional.
Según el escrito leído por la migrante, los deportados fueron retenidos en contra de su voluntad, reteniendo pertenencias como documentos de identidad como pasaportes. Antes de su traslado a un centro de detención llamado Negra Hipólita, les hicieron firmar ciertos documentos en blanco, tomaron sus huellas dactilares y los reseñaron, queriendo imputarles un delito de traición a la patria, sin ninguna asesoría legal o información sobre lo que estaban firmando o ninguna información sobre todo este proceso.
Los migrantes denunciaron que estuvieron más de 24 horas “bajo presión”, “maltrato psicológico” y en varios casos hasta “maltrato físico”. Además, denunciaron que los sometieron a “extorsión, aislamiento y por supuesto violación a la privacidad”.
Los manifestantes llamaron al gobierno islandés a incluir a Venezuela en una lista de países en peligro. “Queremos levantar la voz al mundo para que sepan que Venezuela no está bien, no está mejorando y no es un país seguro”, indicó la migrante.
También señalaron que el gobierno de Venezuela no es garante y no cumple los acuerdos internacionales a los que se compromete.