El ejército surcoreano informó este martes en un comunicado que "Corea del Norte ha lanzado un satélite de reconocimiento en dirección sur", mientras que las autoridades japonesas activaron la alerta de misiles en Okinawa (sur del país) y recomendaron la evacuación de la población local.
El lanzamiento del cohete espacial con un satélite espía a bordo se produce en torno a una hora antes de que entrase en vigor la ventana que Corea del Norte notificó a autoridades marítimas para que se restringiera la navegación en áreas donde podrían caer restos del proyectil y que se extendía entre la medianoche de este martes, hasta el próximo 1 de diciembre.
El sistema nacional nipón de alerta antimisiles J-Alert fue activado a las 10:46 hora local del miércoles, y mediante el mismo se envió un mensaje a los habitantes de la prefectura de Okinawa que avisaba del "aparente lanzamiento de un misil desde Corea del Norte" y se recomendaba "evacuar dentro de un edificio o bajo tierra", según informó la cadena estatal NHK.
Este aviso también fue emitido por megafonía pública en la ciudad de Naha (en la isla de Okinawa, la principal de este archipiélago del sudoeste nipón), y la alerta fue levantada unos 10 minutos después, una vez que las autoridades niponas consideraron que el cohete norcoreano había sobrevolado su territorio y por tanto no comprendía riesgos.
La Guardia Costera japonesa había informado este mismo miércoles de que Corea del Norte notificó una ventana de lanzamiento entre el 22 de noviembre y el 1 de diciembre para lanzar su primer satélite de reconocimiento militar desde la base de Sohae (noroeste del país).
Pionyang ya intentó poner en órbita este satélite espía, el Malligyong-1, en mayo y agosto, pero ambos intentos fallaron por problemas en el cohete espacial Chollima-1 y el régimen anunció que volvería a intentarlo en octubre, aunque no ha cumplido con ese plazo, posiblemente porque Moscú le esté brindando asistencia.
Se cree que la cumbre que celebraron en septiembre el líder norcoreano, Kim Jong-un, y el presidente ruso, Vladímir Putin, sirvió para cimentar un acuerdo para cooperar y comerciar en el terreno militar y aeroespacial.
Seúl y Washington consideran probado que Corea del Norte ha entregado en los últimos tiempos a Rusia millones de rondas de artillería para su uso en Ucrania y creen que Pionyang puede estar recibiendo a cambio apoyo tecnológico y asesoría de cara a este nuevo lanzamiento.
Las sanciones impuestas al régimen por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas -del que Moscú es miembro permanente- prohíben estos intercambios y también el lanzamiento de cohetes espaciales por parte de Pionyang, al considerar que se trata del uso encubierto de tecnología para misiles balísticos intercontinentales (ICBM).
Fuente: EFE