"A mi maestro” es el título de los dos conciertos que el célebre director de orquesta venezolano Gustavo Dudamel dará los próximos 28 y 29 de junio de 2018 en homenaje a José Antonio Abreu, su mentor, maestro e impulsor de la tupida red orquestal venezolana conocida como "El Sistema". Nada de esto llamaría la atención si no fuera por el hecho de que ambos eventos tendrán lugar en Santiago de Chile y no en la Venezuela natal de Dudamel y Abreu.
Dudamel estuvo ausente en la despedida oficial que el chavismo dispensó al maestro Abreu tras su muerte el pasado 24 de marzo de 2018. “Sus funerales fueron dignos de un general y posteriormente se llevó a cabo un concierto con cientos de músicos y coristas”, dice a Deutsche Welle Gisela Kozak, escritora venezolana y autora del ensayo Alabado y cuestionado: José Antonio Abreu y el Sistema de orquestas venezolano.
¿Hablar o callar?
Un punto clave en todo esto es que Abreu jamás se pronunció contra el chavismo, ni siquiera en los momentos más duros de la represión gubernamental contra las protestas en la calle, cuando también músicos vinculados a "El Sistema" resultaron heridos y uno de ellos, el violista Armando Cañizales, murió en mayo de 2017. Después de esto, Dudamel reaccionó contundentemente en Twitter
Celebridad internacional... y destierro
Dudamel había callado durante mucho tiempo a pesar del clamor que durante años le exigió un pronunciamiento claro sobre Venezuela. “Dudamel, siguiendo los consejos de su maestro Abreu, asumió una posición complaciente con el régimen para proteger al 'Sistema”, dice a Deutsche Welle Isaac Nahon-Serfaty, experto venezolano en comunicación política y profesor de la Universidad de Otawa. “Abreu fue siempre muy hábil políticamente desde los tiempos de la democracia civil”, asegura. Por su parte, Gisela Kozak, sostiene que a Dudamel “se le exige que tome partido frente a asuntos políticos de gran interés colectivo, dado su genio musical y su rol de máximo representante del 'Sistema' en el mundo, como si se tratara de un intelectual de la primera mitad del siglo XX”. Así pues, después del contundente, aunque para muchos tardío, pronunciamiento de Dudamel, el director volvió “a dejarse llevar por su temperamento y a hablar de sociedad ‘adolescente’ , ‘polarización’ y otras tibiezas que, desde luego, no contentan a nadie”, señala Kozak.
Mientras Venezuela se sume en una profunda crisis, acuciante a partir de 2014, la popularidad de Gustavo Dudamel sube como la espuma a nivel mundial: continúa con su puesto de director titular de la Filarmónica de Los Ángeles y dirigiendo las orquestas más prestigiosas del mundo, realiza una aparición estelar en “Plaza Sésamo”, sirve de inspiración para uno de los personajes principales de la serie televisiva “Mozart in the Jungle” y se convierte en el director más joven en ponerse al frente de la Filarmónica de Viena para dirigir el Concierto de Año Nuevo 2017, un evento con cifras millonarias de audiencia. Convertido en celebridad internacional en un mundo cada vez más crítico hacia su país, Dudamel no puede callar más. Y el resultado es el destierro. No oficial, pero sí simbólico. “De ser un artista que se fue a hacer carrera y a volverse millonario, se ha convertido en una víctima más”, dice Gisela Kozak. “La revolución lo ha convertido en un desterrado que no puede dirigir la orquesta Simón Bolívar que lo hizo famoso en el mundo”, sentencia la escritora.
El legado de Abreu y el futuro de "El Sistema"
Dudamel se mostró sumamente conmovido en su comunicado de reacción a la muerte de su mentor: "El Maestro José Antonio Abreu nos enseñó que el arte es un derecho universal. (...) Abreu fue para mí una inspiración, un artista, un amigo, un padre, un maestro.(...) Mi compromiso con su legado es eterno e inquebrantable". Los conciertos en Santiago de Chile meses después de la muerte de Abreu parecen ir en esa dirección. La orquesta estará formada por 90 jóvenes músicos procedentes de la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles de Chile, además de reconocidos instrumentistas de las orquestas Filarmónica de Viena, Filarmónica de Berlín, Filarmónica de Gotemburgo, Filarmónica de Los Ángeles y Juvenil Simón Bolívar de Venezuela, invitados especialmente para la ocasión por Gustavo Dudamel.
Dudamel al frente de una de las orquestas de jóvenes venezolanas en Bremen en 2008, durante los tiempos del petropopulismo musical.
Pero el futuro concreto de la red de orquestas venezolana que conforman "El Sistema" es incierto, pese a que “Eduardo Méndez, el sucesor de Abreu, ya ha sido bendecido por el régimen. Y Delcy Rodríguez, actual vicepresidenta de la república y presidenta de la espuria Asamblea Nacional Constituyente, es parte de la junta directiva del 'Sistema”, explica Kozak. Las orquestas de jóvenes funcionaron en su día como la más efectiva embajadora cultural de Venezuela en el propio país y en el mundo, en una suerte de petropopulismo musical a gran escala. “El chavismo ha hecho uso del 'Sistema" para promover los supuestos logros de la revolución”, dice Nahon-Serfaty. “Abreu logró convencer a Chávez del valor social y educativo del 'Sistema' y Chávez vio su potencial propagandístico”.
Pero ese rol parece haber concluido. ¿Tiene sentido para el chavismo continuar financiando orquestas en un país que se desmorona económicamente y cada vez más aislado por gran parte de la comunidad internacional? “En principio, el régimen sí tendría interés en seguir apoyándolo. Pero la caída de ingresos de divisas es brutal y mantener 'El Sistema' implica divisas. Hoy en Venezuela todo está en el aire”, sentencia Nahon-Serfaty.
Autora: María Santacecilia