Desde pequeña Kaylee Moats se dio cuenta
que no tenía vagina pero no quiso explicarlo por vergüenza. Eso no
supuso ningún tipo de inconveniente porque podía orinar con normalidad.
No obstante, todo cambió al conocer a Robbie Limmer, quien se
convertiría en su primer novio serio, cuando cursaba el primer año de
universidad.
Desde ese momento, su síndrome se
transformó en un gran trauma para la joven. Sin embargo, el gran apoyo
de Robbie la animó a tomar cartas en el asunto y tratar de resolver su
situación. Decidió operarse para poder tener una vida sexual activa,
pero la intervención tiene un costo de 15 mil dólares. Una cantidad que
ni ella ni su familia podrían permitirse y que no cubre su obra social
porque la considera una cirugía englobada dentro del campo de la
estética.
En junio de este año su hermana Amanda
tuvo la idea de crear una campaña para recolectar donaciones para ayudar
en la causa. En el sitio “Gofundme” explicó el caso de Kaylee. Uno de
los que aportó de forma regular es su novio, que donó 50 dólares de su
sueldo a fin de mes.
Según el posteo de su hermana en ese
sitio web, recaudaron un total de 21.288 dólares para operarse en
Atlanta, y su sueño está cerca de hacerse realidad.
Qué es el síndrome
Una bebé puede nacer sin vagina o tener la abertura vaginal obstruida por una capa de células que están más altas en la parte de arriba que donde está el himen. La ausencia de la misma muy a menudo se debe al síndrome Mayer Rokitansky Küster Hauser.
En este síndrome, la chica carece de
parte o de todos los órganos reproductores internos (útero, cuello
uterino y trompas de Falopio). En este trastorno, el útero y el canal
vaginal no se desarrollan adecuadamente durante el embarazo y la bebé
nace con un canal vaginal muy corto o sin vagina en absoluto.
La agenesia vaginal es un trastorno
congénito del sistema reproductivo en las mujeres que afecta
aproximadamente a 1 de cada 5.000. La condición típicamente no se
detecta hasta la pubertad cuando la adolescente se retrasa la primera
menstruación o puede ser descubierta con los primeros intentos de tener
sexo.
La operación para hacerle una apertura vagina a Kaylee duraría entre 1 y 2 horas, con un 96% de tasa de éxito.