Selena Gomez volvió a sorprender a sus seguidores
con una confesión, la cual nada tuvo que ver con su vida amorosa o
profesional sino con su salud, al revelar que tuvo un trasplante de
riñón durante este verano.
En su cuenta de Instagram, la cantante estadounidense subió una
imagen en la que aparece en una cama de hospital, tomada de la mano de
una chica que se encuentra en las mismas condiciones, y la acompañó de
un mensaje en el que explica la situación.
“Soy muy consciente de que algunos de mis seguidores han notado que
he estado ausente durante este verano y se han preguntado por qué no
estaba promocionando mi nueva música, de la cual por cierto estoy muy
orgullosa. Descubrí que necesitaba un trasplante de riñón por el lupus
que padezco, y del cual actualmente me estoy recuperando.
“No existen palabras que puedan describir lo muy agradecida que me
siento con mi amiga. Ella me ha hecho el regalo más importante y se ha
sacrificado donándome un riñón. Estoy increíblemente bendecida. Te
quiero mucho hermana”, es el mensaje que escribió Selena y que ayer
alcanzó casi 7 millones de “me gusta”.
La heroína. Hace dos años Selena dio la noticia de que padecía esta
enfermedad que la obligó a retirarse por un tiempo de los escenarios y
de cualquier actividad pública y profesional.