El
presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo, este miércoles, estar
esperando que "algún día" Chile cambie su Constitución vigente, que
calificó como "dictatorial" por haber sido impuesta en 1980, en plena
dictadura militar, por Agusto Pinochet (1973-1990).
El
jefe de Estado venezolano acudió este miércoles a la sede del Poder
Electoral en Caracas para entregar su decreto de convocatoria a una
Asamblea Nacional Constituyente con el que espera se redacte una nueva
Carta Magna en su país, para así refundar el ordenamiento jurídico
interno.
"¿Ustedes sabían que la Constitución vigente en Chile fue la que
impuso Pinochet? Ojalá algún día el pueblo chileno tenga la suerte y
fortuna del pueblo venezolano y pueda convocar a un proceso popular
constituyente y quitarse de encima la Constitución dictatorial del
asesino de Pinochet", afirmó Maduro ante cientos de simpatizantes.
A juicio del mandatario, el pueblo venezolano es "afortunado" por
poder participar mediante voto "secreto, directo y universal" en la
elección de los corredactores de la nueva Constitución, una votación que
se hará, según Maduro, en las próximas semanas y por "ámbitos
sectoriales y territoriales".
Esta iniciativa, sin embargo, ha sido cuestionada por la oposición
venezolana que la tilda de "fraudulenta" al asegurar que el Gobierno
pretende "elegir a dedo" a la mitad de los corredactores de la nueva
Constitución.
El ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz, dijo
ayer que la situación que está viviendo Venezuela se "ha agravado" y es
cada vez "más compleja".
"La ya difícil situación de Venezuela se está tornando aún más
compleja, se ha agravado en buenas cuentas", dijo el canciller chileno a
periodistas y apuntó que "hasta ahora" sabe que esta Constituyente "no
se conformaría a través del sufragio universal libre y secreto sino que a
través de la representación de sectores sociales".
Las declaraciones de Muñoz fueron calificadas de "injerencistas" por la canciller venezolana, Delcy Rodríguez.
Por su parte, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, firmó el 3
de abril pasado un proyecto de ley que modifica el capítulo XV de la
Constitución actual, un paso necesario para la elaboración de una nueva
Carta Magna.
El proyecto de ley establece la creación de una Convención
Constitucional, que deberá ser aprobada por el Parlamento, para redactar
la nueva Constitución. EFE