Desde España, la
reina escogió un trench de Burberry que ya ha lucido en numerosas
ocasiones, pero a su llegada a Japón usó un abrigo-capa bicolor firmada
por Hugo Boss y que también se la hemos visto en alguna ocasión. Una
prenda que combinó con una falda lápiz de cuero negro y jersey negro. Un
estilismo correcto y acertado para la ocasión.
La Reina también ha apostado por el color rojo que tanto hemos visto lucir a Melania Trump,
para asistir a la ceremonia de bienvenida en el Palacio Imperial de
Tokio donde han sido recibidos por los emperadores Akito y Michiko.
Como complementos, su majestad se ha decantado por clásicos salones de
piel negra de Carolina Herrera, a juego con una cartera también de la
firma, y pendientes largos de conchas doradas de Tous, una de sus firmas
preferidas de joyas.
Los reyes de España fueron recibidos el
pasado miércoles por el emperador japonés Akihito y la emperatriz
Michiko, tras llegar la víspera a Japón para una visita de Estado de
cuatro días.
La familia real española no había visitado Japón desde noviembre de 2008, cuando aún reinaba Juan Carlos I y la reina Sofía.