Hasta
el momento, la mayoría de estudios realizados sobre la relación entre
el deseo sexual y el deporte estaban enfocados en la mujer y los
desequilibrios hormonales que causaba el exceso de ejercicio en su
cuerpo. Pero esta vez se puso foco en cómo incide el ejercicio en la
salud y el deseo sexual del hombre.
Y los resultados que se obtuvieron probaron algo que ya se sospechaba:
El punto de partida
Hasta el momento era poca la información que se tenía sobre el
impacto del ejercicio en la libido y la fertilidad masculinas. Sí se
sabía que la actividad física en moderación podía promover una mayor
producción de testosterona pero no cuál podía ser el efecto del
ejercicio (especialmente el de fuerza) en exceso
Hasta el momento los estudios que se habían realizado sobre el tema
solo se enfocaban en el cambio hormonal que podría sufrir el cuerpo,
pero no en las emociones ni el comportamiento sexual, dos aspectos más
complejos de estudiar.
Por eso, para este estudio realizado en la Universidad de Carolina
del Norte, se decidió realizar un cuestionario a los hombres acerca de
su vida sexual. El cuestionario consultaba a los hombres con qué
frecuencia pensaban en sexo y cada cuánto mantenían relaciones sexuales.
A su vez, en otro cuestionario se pedía a los hombres que especificaran
sus hábitos de ejercicio, la intensidad de sus entrenamientos y cuánto
entrenaban por semana.
Participación variada
Alrededor de 1.100 hombres físicamente activos completaron el
cuestionario, la mayoría de ellos eran atletas con experiencia de años.
Los científicos clasificaron a los hombres según la intensidad y la
extensión de sus entrenamientos. Por un lado, aquellos con
entrenamientos cortos, moderados y largos y por otros a aquellos con
entrenamientos suaves, moderados y extremadamente intensos.
Por otra parte, se agrupó a los hombres de acuerdo a su vida sexual:
el interés que cada uno sentía por el sexo y con qué frecuencia mantenía
relaciones sexuales.
Los resultados
Los hombres cuyas rutinas de ejercicio eran moderadas o de poca
intensidad reportaron un deseo sexual mayor que aquellos hombres con
entrenamientos prolongados e intensos.
Anthony Hackney, el profesor de psicología del ejercicio y nutrición
en la Universidad de Carolina del Norte que llevó a cabo el estudio,
afirmó que “el exceso de ejercicio está asociado con un menor deseo
sexual”.
Mucho por investigar
A pesar de que el vínculo entre ejercicio y deseo sexual es claro, es
necesario realizar más estudios para entrar en detalles y garantizar
que existe tal correlación.
También se proponen investigar si es la intensidad o la duración de
los entrenamientos lo que impacta más en el deseo sexual masculino y
determinar en qué punto el ejercicio comienza a afectar la libido.
Recomendaciones
Los estudios pueden llevar mucho tiempo, ya que se requiere de muchos
hombres que estén dispuestos a cooperar con ellos. Pero los expertos
sugieren que si un hombre está preocupado por que el entrenamiento esté
afectando su vida sexual, debería reducir la cantidad o intensidad para
ver si su deseo sexual mejora.
También se aconseja a todas las parejas que estén buscando concebir
que presten especial atención a cómo influye esto en su vida sexual y si
podría estar teniendo consecuencias negativas en la concepción.