La sonda estadounidense Cassini, en órbita alrededor de Saturno desde
2004, retomó el contacto total este jueves con la NASA tras zambullirse
entre los anillos de este planeta gaseoso gigante, atravesando una zona
hasta ahora inexplorada, indicó la agencia espacial.
"¡Lo hemos conseguido! Cassini está
de nuevo en contacto con la Tierra y transmite datos después de haberse
sumergido con éxito en el espacio que separa a Saturno de sus anillos",
tuiteó el Jet Propulsion Laboratory (JPL), a cargo de esta misión, para
luego agregar: "¡El gran salto final ha comenzado!".
La sonda efectuó así la primera de
las 22 entradas en ese espacio de unos 2.400 kilómetros, La última será
el 15 de septiembre en la atmósfera de Saturno, donde se desintegrará.
Este descenso inédito comenzó el
miércoles a las 09H00 GMT. Poco después, Cassini dejó de transmitir todo
tipo de comunicación por casi 24 horas.
Durante este período, la nave no
tripulada se acercó más a la cubierta nubosa de Saturno y efectuó
observaciones, levantamientos y tomó fotografías con sus 12
instrumentos. Su analizador de polvo cósmico debía tomar muestras
directas de partículas al atravesar los anillos.
"La última parte de la vida de
Cassini será realmente como fuegos artificiales porque, aventurándose
entre la superficie de Saturno y sus anillos, la sonda hará mediciones
científicas que de otra manera habrían sido imposibles", señaló esta
semana Luciano Iess, un miembro del equipo de investigación de Cassini
en la Universidad italiana de La Sapienza.
"Cassini ha producido un tesoro de
descubrimientos que nos harán reescribir las obras de ciencias
planetarias en muchos temas", dijo el martes Nicolas Altobelli, un
responsable científico de la misión en la Agencia Espacial Europea
(ESA).
"Lo que aprendemos de las últimas
vueltas de Cassini nos permitirá mejorar nuestro conocimiento sobre la
formación y la evolución de los planetas gigantes y de los sistemas
planetarios en general", comentó también recientemente Thomas Zurbuchen,
jefe adjunto de las misiones científicas de la NASA.
Cassini ejecutó con éxito el 22 de
abril su 127º y último sobrevuelo cercano de Titán, la mayor luna de
Saturno, pasando sólo a 979 kilómetros de la superficie y soportando una
fuerte aceleración que dio inicio a la maniobra final.