En primer lugar debes que saber que la Pink Moon, o luna rosa, en
realidad no se teñirá de rosa. Su nombre no viene de su color, sino de
una tradición antigua.
Se le llama luna rosa a la primera luna llena después del equinoccio de primavera, siguiendo el calendario del hemisferio norte. Tuvo lugar el pasado 20 de marzo y coincide con el inicio del otoño en el hemisferio sur.
¿Porqué recibe este curioso nombre?
Así la llamaron los primeros nativos americanos, en honor a las Phlox
salvajes, flores de primavera con un color rosado muy agradable.
La luna rosa coincide con la celebración de la Semana Santa para la religión católica, y no es casualidad: la fecha de esta celebración es cada año durante la primer luna llena luego del equinoccio.
Este año la luna llena tendrá lugar el 11 de abril y esa noche podremos disfrutarla. Para los nativos era una luna que significaba abundancia.
La luna rosa coincide con la celebración de la Semana Santa para la religión católica, y no es casualidad: la fecha de esta celebración es cada año durante la primer luna llena luego del equinoccio.
Este año la luna llena tendrá lugar el 11 de abril y esa noche podremos disfrutarla. Para los nativos era una luna que significaba abundancia.
Qué importa si no es rosada? La Pink
Moon del 11 de abril será un fenómeno digno de observar. Sigue estos
consejos para apreciar todo el esplendor de la luna llena.
Observa el cielo desde el lugar más oscuro que puedas encontrar, como
tu patio o mejor aún, el campo o las orillas de un lago o el mar.
A lo largo de la noche, puedes ver cómo la luna cambia de posición en el cielo.
Cuando está cerca del horizonte, por
la tarde, a veces la luna se ve más grande, como aumentada. También
puede cambiar su color, a ligeramente rosado o amarillo.
Desde el hemisferio sur de la Tierra,
la Luna se ve invertida respecto de cómo se ve desde el hemisferio
norte. Vista desde el hemisferio sur, la Luna tiene el polo norte en la
parte inferior, pero vista desde el norte está al revés. Así que si
viajas al otro hemisferio no te pierdas la posibilidad de observar este
detalle.
Al contrario de lo que puedas creer,
la luna llena no es la mejor para observar los valles, montes y cráteres
de la luna. Es que al estar opuesta al sol, se ve más plana, y ellos se
ven mejor cuando hay juegos de luces y sombras.
Una característica clásica de la Luna
es Sinus Iridium y las montañas adyacentes, que forman una bahía de
lava. Gracias a su enorme tamaño, esta estructura puedes verla a simple
vista e incluso tomarle fotografías.