En una escena dolorosa una chica de 17 años se mete a una bañera con
una navaja. La vemos cortarse la piel y sangrar, la oímos llorar y cómo
le cuesta trabajo respirar. Después queda inerte.
El suicidio de la protagonista de la
popular serie de Netflix "13 Reasons Why" no debería ser un shock, pues
es presentado en el último episodio de un programa construido alrededor
de la muerte del personaje. Pero saber que ocurrirá no hace que sea más
fácil.
La sobrecogedora escena ha desatado
críticas por presentar el suicidio bajo una luz romántica y ha llevado a
que muchas escuelas en el país envíen cartas de advertencia a padres de
familia y tutores. Los creadores del programa no tienen remordimientos.
Argumentan que su retrato honesto debía ser “resuelto y crudo”.
"Mucha gente está acusando al
programa de idealizar el suicidio y siento profundamente _ y creo que
todos los que hicimos el programa _ que hicimos justo lo contrario”,
dijo el escritor Brian Yorkey, quien ganó un Tony y un Pulitzer por el
musical "Next to Normal", que aborda problemas de salud mental. "Lo que
hicimos fue retratar el suicidio y lo pusimos como algo muy feo y muy
dañino”.
El drama de 13 episodios, coproducido
por la actriz y cantante Selena Gómez, está basado en la novela para
jóvenes de Jay Asher de 2007 sobre una estudiante de secundaria que se
mata y deja 13 grabaciones de voz en las que detalla los eventos que
llevaron a su muerte, incluyendo abuso sexual, consumo de drogas y
acoso.
Como suele ocurrir con las series de
Netflix, la plataforma liberó todos los capítulos el mismo día, el 31 de
marzo, lo que hizo que los especialistas en prevención del suicidio
expresaran su preocupación por que los adolescentes puedan verla
completa sin la posibilidad de analizar detenidamente los temas o hacer
preguntas.
También dijeron que desearían que el
programa incluyera referencias constantes a la línea telefónica nacional
de prevención del suicidio.
“Sabemos que históricamente los
detalles gráficos sobre el suicidio no son recomendados”, dijo Phyllis
Alongi, directora clínica de la Sociedad para la Prevención del Suicidio
entre Adolescentes. "Entiendo lo que dicen los productores, pero podría
realmente peligroso y creo que debemos ser un poco más responsables”.
Netflix y los creadores del programa
señalaron que consultaron con varios expertos en salud mental e
incluyeron un programa de 30 minutos titulado "Beyond the Reasons" que
profundiza en los temas presentados, además de vínculos a un sitio con
materiales relacionados.
La serie tiene una clasificación
TV-MA, lo que quiere decir que podría no ser apta para menores de 17
años, y tres episodios con material explícito incluyen advertencias para
los espectadores.
Pero algunos profesionales de la
salud mental han ido un poco más allá. La Asociación Nacional de
Psicólogos Escolares declaró: “No recomendamos que los jóvenes
vulnerables, especialmente aquellos que han tenido algún grado de ideas
suicidas, vean la serie”.
Los críticos del programa argumentan
que la depresión y las enfermedades mentales, claves para entender el
suicidio, son pocas veces mencionadas en la serie y que el hecho de que
la protagonista Hannah cuente su historia después de la muerte envía un
mensaje potencialmente peligroso. También están inconformes con que el
consejero escolar que se muestra parezca culpar a la víctima.
La Fundación Jed y la organización
Suicide Awareness Voices of Education unieron esfuerzos para crear 13
puntos a abordar entre jóvenes y tutores para analizar mientras ven la
serie, incluyendo una advertencia de que la forma en la que el consejero
estudiantil es retratado “no es típica” y que “dejar mensajes desde el
más allá es una dramatización producida en Hollywood".
Escuelas en todo el país han alertado
a los padres de familia para informarles que sus hijos adolescentes
podrían estar viendo la serie y los invitan a que la vean con ellos,
además de darles información para ayudarles a hablar sobre ella.
En la comunidad de Grand Island en
Nueva York, las autoridades escolares advirtieron que la serie “explota
el suicidio con fines sensacionalistas”. El mayor distrito escolar de
Indiana advirtió en un correo electrónico que la serie “no representa
exactamente lo que quisiéramos o esperaríamos que hicieran los
individuos si están teniendo problemas o están en una crisis”.
En Maryland, los directores del
sistema escolar público del condado de Montgomery notaron que los
adolescentes hablaban de la serie y buscaron asegurarse de que los
padres tuvieran recursos para responder preguntas difíciles. Una carta
de advertencia y vínculos a sitios relacionados fue enviada a los 35.000
estudiantes de secundaria del condado.
"Hay muchas cosas que abordar y
digerir. Si eres una mente joven en crecimiento y afectada por lo que
ves, esto podría tener un impacto”, dijo Derek Turner, vocero del
distrito. "Así que les estamos dando consejos y herramientas”.
De acuerdo con los Centros para el
Control y Prevención de Enfermedades, el suicidio fue la segunda causa
de muerte entre niños y jóvenes de 10 a 24 años en 2014.
La doctora Helen Hsu, una psicóloga
clínica en Fremont, California, cuyo trabajo incluye la prevención del
suicidio en escuelas, ayudó a crear algunos de los guiones de "13
Reasons Why". Dijo que no mostrar el suicidio de Hannah sería casi
“evasivo” y que los estudios médicos no han llegado a conclusiones
definitivas sobre los riesgos de un contagio de suicidio. Además, los
adolescentes pueden encontrar en internet guías gráficas de cómo
suicidarse.
"Si crees que tu hijo no ha podido
encontrar esto en un segundo en internet en los últimos 10 años estás
tristemente equivocado”, dijo. “Decir que esto va a desatarlo es de
alguna manera ingenuo. Lo que realmente enfaticé en el guion fue ‘esto
se tiene que enfocar en el hecho de que no es glamuroso, que es feo, es
doloroso y realmente quiero que se enfoquen en el dolor de los padres y
de la gente que se queda detrás’”.
Aunque el suicidio ha sido retratado
en programas de televisión, la edad de los jóvenes personajes en "13
Reasons Why" es pionera. Definitivamente ha tocado un nervio sensible:
el programa tiene 340.000 seguidores en Twitter y 2,4 millones de me
gusta en Facebook.
Gómez, quien ha hablado abiertamente
sobre sus propios problemas de salud mental, dijo que estaba preparada
para las críticas: “Van a llegar pase lo que pase. No es un tema del que
se pueda hablar fácilmente, pero me siento afortunada por cómo le ha
ido (a la serie)”.
Yorkey dijo que los creadores querían
contar una historia sobre jóvenes “de una manera más honesta a cómo se
ha hecho en televisión”.
“Entiendo que es difícil de ver”,
dijo. “La intención es que sea difícil de ver porque estas cosas son
increíblemente difíciles de entender y quisimos decir ‘este tipo de
cosas están pasando en las vidas de los chicos. Pueden mantenerse
callados, pueden impedir que los chicos vean programas al respecto, pero
eso no hará que deje de ocurrir y deberían estar hablando al
respecto’”.