El escenario se muestra desalentador para Marco Coello, el joven venezolano que denunció tortura por parte del Gobierno de Nicolás Maduro en 2014 y que se encuentra actualmente detenido en el Centro de Detención de Inmigrantes de Krome, ubicado en el oeste de Miami-Dade, en Florida.
Uno de los días más importante para él desde que emigró a los Estados
Unidos, huyendo de una sentencia condenatoria en Venezuela, despertó
los peores temores de cualquier inmigrante en la nación norteamericana:
ser detenido.
Ante este panorama la defensa de Coello teme otros riesgos como la deportación.
“Nos preocupa porque la nueva orden que dio el presidente (Donald)
Trump le da discreción y autoridad a los oficiales de hacer una
deportación expedita dentro de 72 horas sin necesariamente tener que ver
a un juez”, expresó Ros-Ana Guillen, especialista en migración y miembro del equipo legal que acompaña a Coello.
“Si esto viene de una orden del gobierno venezolano para que lo regresen y lo metan preso, es muy grave”, añadió.
Al equipo de abogados de Coello le cayó por sorpresa la detención del
joven, el mismo día que tenía previsto su primera cita para la
solicitud de asilo. Una situación inédita, en opinión de Guillen.
“No tenemos idea, esto es algo que en 20 años que tiene nuestra firma
abierta nunca nos había pasado. A él lo llamaron de inmigración para
una entrevista. Ni siquiera le dieron la oportunidad de hablar, porque
ya había dos personas de ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos)
esperándolo. La oficial de migración le dijo que no podía escuchar su
caso de asilo en este momento”, expuso Guillen, quienes miembro de la
firma Blandon Law, el equipo legal que acompaña a Coello.
De acuerdo con la especialista en migración son tres los escenarios
que deberá enfrentar Coello a partir de hoy: ir a una corte y
presentarse ante un juez; el pago de una la fianza o el peor de los
casos, la deportación.
Guillen señala que durante la retención la funcionaria aseguró que le
explicaría las razones. “Sin embargo, le pidieron que lo acompañara y
se lo llevaron sin decirle por qué”, aseguró.
Mientras sus abogados tramitan una fianza de emergencia, se desconoce cuánto tiempo puede permanecer en el lugar.
“Él está muy asustado y muy mal, porque no debe estar detenido. Su
mente no puede soportar una reclusión más”, agregó Guillén en referencia
a la condición psicológica del joven, tras denunciar torturas en
Venezuela.
Errores en el proceso
A juicio de José Colina, presidente de Venezolanos Perseguidos
Políticos en el Exilio, Veppex, y quien desde su experiencia personal
conoce el proceso, asegura que en el pasado se han producido situaciones
similares con otros ciudadanos que han pedido asilo, tal como ocurrió
con Coello. En la mayoría, los casos han sido por una orden de detención
de Interpol o porque el solicitante salió del territorio
estadounidenses.
“Tiene que ser por una violación al proceso migratorio. Por ello es
necesario determinar las razones de la detención. Por ejemplo, si una
persona que está pidiendo asilo y tiene un juicio abierto o lo están
solicitando por Interpol desde su país, eso puede generar que se le
retenga mientras investigan. La clave está en que se explique con
detalle cuál es la situación de esa persona que pide el asilo”.
No obstante, la abogada Ros-Ana Guillen asegura que Coello no aparece en la lista pública de Interpol.
“Revisamos la lista pública de Interpol, donde aparecen 59 venezolanos que están siendo buscados. Es muy extraño todo, a menos de que haya una orden secreta que no haya sido pública y que nosotros no sabemos”.
“Revisamos la lista pública de Interpol, donde aparecen 59 venezolanos que están siendo buscados. Es muy extraño todo, a menos de que haya una orden secreta que no haya sido pública y que nosotros no sabemos”.
Hecho “Atípico”
Por su parte, el abogado Leonardo Viota Sesin,
también especialista en el área de migración, coincide con la defensa de
Coello en que no es común la detención de una persona cuando es
convocada a su cita para la solicitud de asilo.
“Algo tiene que estar pasando, pero lo cierto es que esto es fuera de
lo normal. El gobierno americano tiene que informarle al abogado que
está pasando con el detenido, puede ser que haya ocurrido un error con
él, a menos que sea un caso de seguridad nacional para los Estados
Unidos. De lo contario, sí es atípico”.
Actualmente, el departamento de migración de los Estados Unidos tiene
un retraso en el otorgamiento de asilos, debido al gran número de
solicitudes que en 2016 ubicó a los venezolanos con más de 18.000
solicitudes en el primer lugar, según datos del Refugee Freedom Program y el último boletín estadístico del Servicio de Inmigración y Ciudadanía de los Estados Unidos (Uscis).
Entre esas solicitudes se encuentra la de Coello, uno de los jóvenes
quien fue juzgado junto al dirigente Leopoldo López y otros cuatro
estudiantes por los sucesos del 12 de febrero de 2014 que hoy pagan
cárcel en Venezuela
María José Martínez