Muchos fumadores tosen permanentemente.
¿Por qué? Porque los pelitos que recubren las vías respiratorias suelen
expeler todo lo que no debe llegar a los pulmones. Pero apenas después
del primer cigarrillo, estos pelitos dejan de trabajar por unas siete
horas. Eso hace que los fumadores acumulen secreciones que luego deben
ser expulsadas.
Los fumadores no deben dar por hecho que esto es así. Una vez al año deberían controlar sus pulmones. Y es que eso que se llama vulgarmente "tos de fumador" suele derivar en una enfermedad de obstrucción pulmonar crónica o EPOC. Dado que el pulmón se siente sobreexigido por el tabaquismo, se defiende inflamándose. Y las proteínas que deberían “comerse" las bacterias comienzan a destruir el tejido. Es decir, que de algún modo el pulmón se come a sí mismo.
Lo peor es que los pacientes suelen darse cuenta de esto cuando ya es muy tarde. Algunos pacientes llegan a la consulta con el 60 por ciento del pulmón afectado. La gente piensa que perdió estado físico, cuando lo que pasó es que sus pulmones están destruidos.
Una vez que comenzó este proceso, no se puede revertir, aunque sí retrasar. Por eso es importante visitar regularmente al médico.
Los fumadores no deben dar por hecho que esto es así. Una vez al año deberían controlar sus pulmones. Y es que eso que se llama vulgarmente "tos de fumador" suele derivar en una enfermedad de obstrucción pulmonar crónica o EPOC. Dado que el pulmón se siente sobreexigido por el tabaquismo, se defiende inflamándose. Y las proteínas que deberían “comerse" las bacterias comienzan a destruir el tejido. Es decir, que de algún modo el pulmón se come a sí mismo.
Lo peor es que los pacientes suelen darse cuenta de esto cuando ya es muy tarde. Algunos pacientes llegan a la consulta con el 60 por ciento del pulmón afectado. La gente piensa que perdió estado físico, cuando lo que pasó es que sus pulmones están destruidos.
Una vez que comenzó este proceso, no se puede revertir, aunque sí retrasar. Por eso es importante visitar regularmente al médico.
El
cigarrillo es responsable de la mitad de las muertes de los fumadores,
quienes además tienen una expectativa de entre 10 y 15 años menos que
las personas que no fuman.