El presidente electo de EEUU, Donald Trump,
anunció hoy que mantendrá reuniones con los líderes de las agencias de
inteligencia de su país la próxima semana con el objetivo de recibir
nueva información sobre la supuesta injerencia de Rusia en las
elecciones estadounidenses.
“Es
hora de que nuestro país avance hacia cosas más grandes y mejores. Sin
embargo, en el interés de nuestro país y de su buena gente, me
reuniré con los líderes de la comunidad de inteligencia la próxima
semana para que me actualicen sobre los hechos de esta situación”, dijo Trump en un escueto comunicado.
Trump, que asumirá el poder el 20 de enero, reaccionó así a las sanciones anunciadas hoy por el presidente de EEUU, Barack Obama,
quien culpa al Gobierno ruso de intervenir en las elecciones
presidenciales estadounidenses mediante ataques informáticos destinados a
dañar a la candidata demócrata, Hillary Clinton.
En concreto, Obama ha ordenado la expulsión de 35 diplomáticos rusos y sus familias en un plazo de 72 horas, así como el cierre de dos centros propiedad del Gobierno ruso en Nueva York y Maryland.
Además, el Gobierno de EEUU
ha anunciado sanciones económicas que implican la congelación de bienes
de las dos principales agencias de inteligencia rusas: el Departamento Central de Inteligencia (militar, GRU por su acrónimo en ruso) y al Servicio Federal de Seguridad (seguridad nacional, FSB).
Una vez que asuma la Presidencia de EEUU,
Trump tendrá el poder de mantener o levantar las sanciones anunciadas
hoy por Obama, así como otros castigos impuestos contra el Kremlin por
la anexión rusa de la península de Crimea en marzo de 2014 y por el
apoyo de Moscú a los separatistas prorrusos en el este de Ucrania.
Trump
ha insinuado su voluntad de impulsar un cambio de rumbo en las actuales
tensas relaciones que mantienen Washington y Moscú, a pesar de que
algunos de sus correligionarios republicanos del Congreso sitúan a Rusia
como uno de los principales peligros para la seguridad de Estados
Unidos.
EFE