as grandes historias de la humanidad han enseñado que las obras más monumentales eran construidas por personas cuya osadía rozaba lo fantasioso y el resultado le daba una bofetada a cualquier intento de lógica. Deyna Castellanos erigió ayer su propio monumento al gol.
Sólo restaban unos pocos segundos para que los tres puntos y la victoria se esfumaran, y un empate 1-1 con Camerún parecía poco premio para toda una faena de lucha. Sin embargo, Castellanos pensó y ejecutó lo que pocos se atreven en horas bajas con el tanto africano y un último suspiro en el tiempo reglamentario.
Tras la reanudación, la capitana de la selección venezolana de fútbol femenino sub 17 levantó la mirada diezmada de sus compañeras con el recorrido que hacía la pelota con su derechazo desde la mitad de la cancha que sorprendió a la guardameta rival y otorgó el triunfo 2-1 en la segunda jornada del Campeonato Mundial de la categoría que se disputa en Jordania.
El siguiente paso fue celebrar ante la fuerza del puño cerrado de Castellanos y su grito de sentencia. Las tres unidades, poco probables hacía segundos, eran un hecho.
Superación colectiva
Con la necesidad de ganar para no hipotecar sus opciones de avanzar a la siguiente fase por el grupo B, la Vinotinto tuvo un partido de superación colectiva ante una clara superioridad física de Camerún.
A los problemas para manejar la pelota se sumaron la presión alta africana y el asedio de las leonas, pese al poco criterio en la definición.
El juego brusco camerunés propició numerosas faltas sobre las criollas, una de ellas fue aprovechada por Castellanos.
La dorsal nueve talló las primeras molduras de una tarde pletórica con un tiro libre ejecutado a la perfección, que abrió el marcador en el minuto 22 del primer tiempo.
Venezuela se fue al descanso arriba 1-0, pero consciente de que en el complemento la batalla sería más dura.
Con manejo poco claro por parte de ambas oncenas, el segundo tiempo se diluyó con pocas opciones para anotar, al tiempo que el cansancio hacía mella en las venezolanas.
En la fracción 90+3, Alexandra Takounda, quien ingresó por Eva Touta, empató 1-1 con un sutil taco tras un centro al corazón del área criolla.
Acto seguido, Deyna refrendó con su pierna derecha un final mejor para Venezuela.