Dos
jóvenes de Newark (Ohio, Estados Unidos), Chase Prior y Patrick
Williams, vivieron unos momentos de terror después de encontrarse a un
payaso armado en una zona boscosa de la ciudad, informa el periódico
británico 'The Sun'.
Otros incidentes similares han tenido lugar en diferentes lugares de EE.UU. como Carolina del Norte y del Sur, Alabama, Georgia y Kentucky, en los que personas disfrazadas de payasos han estado involucradas en robos, secuestros y otros delitos.
Esos sucesos han provocado la alarma en la población norteamericana, especialmente entre los niños.