La actriz y activista de ultraderecha, María Conchita Alonso, declaró al programa “Sábado en la noche” que lamenta que los jóvenes de ahora no puedan vivir los tiempos que disfrutó su generación y afirmó que el actual Gobierno Nacional "no podrá quitarle sus sueños y años vividos en Caracas".
La exreina de belleza, acusada de solicitar al gobierno de Barack Obama la intervención de Venezuela, habría estado en proceso de ver revocada su nacionalidad criolla por parte del Ministerio de Interior y Justicia en 2014. Sin embargo, la artista asegura no saber qué ha sucedido con este trámite: “…me importa tres pepinos. A mí no me pueden quitar el amor que siento por Venezuela, no me pueden quitar los años maravillosos que viví en el país que es mío también”, aseveró.
En lo referente al escándalo que protagonizara a las afueras de un teatro de Miami donde la actriz Mimí Lazo presentó la obra “A mi gordo no me lo quita nadie”, Alonso expresó que no hay pruebas de esa situación y que seguramente todo habría sido un plan de su colega de tablas para obtener publicidad: “ella es muy inteligente para hacer esas cosas”, concluyó.
