Hoy en día, casi todas las personas en el todo mundo han visto o leído a Harry Potter y de no ser así, al menos saben que existe y lo popular que es.
Después del final de la historia del buen Harry, no se supo mucho de qué fue lo que pasó con algunos personajes, o lo que hicieron los actores que los interpretaron. Es por eso que hoy vamos a hablar de un actor de la película que pasó a tener un cambio completamente radical, ya que pasó de usar la magia para defenderse, a emplear sus habilidades en combate mano a mano.
Hablamos de Josh Herdman, quien también es conocido como uno de los dos chavillos que siempre acompañaban a Draco Malfoy para molestar a Harry Potter y a sus amigos. Este chico decidió que además de actuar, también quería experimentar la emoción de pelear, por lo que hizo su debut en la MMA al ganar su pelea en Romford, al este de Londres.
¿Cambio muchísimo, no? Bueno, según lo que dice Herdman, aún quiere tener carrera en el cine, pero hay otra pasión que no puede ignorar.
“Es un poco como vivir jugando a la lotería. No lo veo como un cambio en mi carrera. La actuación y las peleas me apasionan.”
Es increíble como pasó de ser un joven bully con aspecto de niño de escuela privada a un tipo rapado y lleno de tatuajes que podría patearnos el trasero. No cabe duda que la vida tiene curiosos caminos en su haber.
Después del final de la historia del buen Harry, no se supo mucho de qué fue lo que pasó con algunos personajes, o lo que hicieron los actores que los interpretaron. Es por eso que hoy vamos a hablar de un actor de la película que pasó a tener un cambio completamente radical, ya que pasó de usar la magia para defenderse, a emplear sus habilidades en combate mano a mano.
Hablamos de Josh Herdman, quien también es conocido como uno de los dos chavillos que siempre acompañaban a Draco Malfoy para molestar a Harry Potter y a sus amigos. Este chico decidió que además de actuar, también quería experimentar la emoción de pelear, por lo que hizo su debut en la MMA al ganar su pelea en Romford, al este de Londres.
¿Cambio muchísimo, no? Bueno, según lo que dice Herdman, aún quiere tener carrera en el cine, pero hay otra pasión que no puede ignorar.
“Es un poco como vivir jugando a la lotería. No lo veo como un cambio en mi carrera. La actuación y las peleas me apasionan.”
Es increíble como pasó de ser un joven bully con aspecto de niño de escuela privada a un tipo rapado y lleno de tatuajes que podría patearnos el trasero. No cabe duda que la vida tiene curiosos caminos en su haber.