Se
supone que el amor de toda madre es incomparable, en este caso, no fue
así ya que más pudo el dinero que la protección y el cariño. En el
estado Carabobo, dos niñas, una de 10 y otra de 13 años, eran obligadas
para producir videos sexuales, la progenitora de ambas cobraba por
alquilarlas.
La
inescrupulosa mujer, junto a su pareja fueron detenidos por
funcionarios de la policía regional, luego que la mayor de las abusadas
rompió el silencio y formuló la denuncia, esta además, era obligada a
mantener un romance con un hombre de 50 años.
El director general de
la Policía Regional, Carlos Alcántara, indicó que en la vivienda de los
abusadores fueron encontrados varios equipos de filmación, comprobando
el tráfico de menores.
LaIguana.TV