Cuando los actores usan los videos sexuales como 'estrategia' de marketing



Quizás David Zepeda pegó el grito al cielo o, seguramente,  le suplicó a la tierra que se lo tragara  cuando esta semana un video casero, en el que  aparece desnudo y masturbándose fue publicado en internet. 

El actor y modelo mexicano  se une a la extensa lista de celebridades que quedaron marcadas de por vida luego de  sus filmaciones íntimas —en la que se les observa estimulándose o tendiendo sexo con sus parejas del momento—    se filtraran en la red.        

Al protagonista de la telenovela Hasta el fin del mundo  le tocó afrontar su barranco:  “Se invadió mi privacidad, mi intimidad y pues ya no hay mucho que hacer, ya la gente ha visto eso y pues yo aguantando. No tomaré acciones legales al respecto”. 

El director de contenidos digitales de  Yopo Agency, Oliver Ollarves, analiza: “Obviamente este material aumentará el raiting de las producciones en las que actúa, en este caso la novela que protagoniza con Marjorie De Sousa. Sin embargo, la noticia será la comidilla de las revistas y los shows de chismes durante un tiempo, pero en lo que aparezca algo que genere más morbo  en el público, el video de Zepeda será archivado”.  

Al ahondar en temas de popularidad, lo que haga o deje de hacer un artista siempre será de interés para el público, evalúa la publicista Ivette Finol. “Revelar parte de su intimidad es un arma de doble filo:  su fama sube como la espuma o llega el fin de su carrera”.

Si devolvemos el calendario y nos situamos en el 2002, un par de actores que saboreaba las mieles del éxito quedó sumergido en el escándalo “porno” que, hasta ahora, ha sido el más polémico de Venezuela: Roxana Díaz y Jorge Reyes. 

La abogada Nora Mosquera recuerda que estudiaba en la universidad cuando el video era vendido por buhoneros en la calle. “Fue un furor porque nos reuníamos en las casas para ver, detallar y criticar las escenas, una y otra vez. ¡Hasta comprábamos cotufas!”.

Al actor criollo le pasó factura el asunto. Estuvo los dos años posteriores sin trabajo y  confesó que en la calle lo llamaban gay. Por suerte, su carrera resurgió en Colombia, pues no surgieron ofertas en nuestro país.
Desde ese episodio, las alarmas se encendieron entre los artistas nacionales: Se rumoró sobre la existencia de otro corto de reyes con Gaby Espino, pero quedó en chisme de pasillo. Los que no se salvaron de caer en el escrutinio público fueron el animador Luis Olavarrieta y el exsalserín Leonardo Corredor, que se grabaron, por separado, autocomplaciéndose.    

 Otras q ue fueron obligadas a compartir su intimidad fueron Kim Kardashian, Pamela Anderson y Paris Hilton, ganando, irónicamente, la fama de la que hoy son dueñas. 






 
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