La colombiana contó cómo lidia con la crianza de su hijo.
Aunque la cantante Shakira siempre se ha jactado de ser un espíritu libre, su papel de madre de Milan (23 meses) -fruto de su relación con el futbolista Gerard Piqué-
le ha ayudado a encontrar su propia vena “autoritaria” para inculcar a
su hijo sentido de la disciplina sin dejar por ello de mimarle.
“Creo que es muy importante ser autoritario, pero siempre
me aseguro de que mi hijo se sienta querido, valorado y protegido”,
explicó la colombiana en un encuentro organizado por Fisher-Price
con sus fans a través de las redes sociales, durante el que también
desveló que su filosofía educativa tiene mucho que ver con la que
utilizaron con ella sus propios padres: “Siempre he estado muy unida a
mis padres. Aprecio los valores que me enseñaron y los intento compartir
con mi hijo”.
No cabe duda de que la capacidad de Shakira -quien en la actualidad está esperando su segundo hijo junto a Piqué-
para mostrarse severa con su pequeño cuando la ocasión lo requiere le
resultará enormemente útil si finalmente decide cumplir su sueño de
formar una familia numerosa, aunque eso sí, sin llegar al extremo de
formar “su propio equipo de fútbol”, una intención que ella misma se
encargó de proclamar a los cuatro vientos tras el nacimiento de Milan.
“Quizás fui un poco ambiciosa cuando dije eso [de que
quería tener mi propio equipo de fútbol]. Con dos o tres niños ya
estaría bien. Y me gustaría tener una niña”, aseguraba recientemente la
cantante a la revista Parents.