Que la serie televisión de 'Juego de Tronos' está avanzando a un ritmo frenético es evidente, y la mayoría de fans que se congregaron en el Neuchâtel International Fantastic Film Festival de Suiza, donde el escritor George R.R. Martin
dio una charla, temen que el show de la HBO atrape a los libros en un
par de temporadas. De hecho, en la cuarta ya quedaba resuelto el tercer
libro, por lo que sólo quedan por llevar a la pequeña pantalla el cuarto
y el quinto -con sus más de mil páginas, cierto-, más el sexto y el
séptimo, que concluirán la saga, aún sin fecha de publicación. “Se ha hablado mucho de acabar la serie con una gran película,
pues los libros cada vez se hacen más grandes. Pero ya somos el show
televisivo más caro del mundo y con el reparto más multitudinario, por
lo que no podemos permitirnos añadir más personajes”, comenta el
escritor.
Martin ve como única solución hacer algunas concesiones
de guión y simplificar la historia o bien ampliar el número de
capítulos, por lo que se necesitaría un presupuesto equivalente al de
una película y no una serie, “especialmente ahora que he sabido que
veremos grandes batallas, bastante acción que inmiscuye a los dragones y
varias cosas interesantes que pasarán en el Muro y más allá, donde se
encuentran los Caminantes Blancos”, añade.
Aparte de hablar de la
serie, George R.R. Martin también comentó varios aspectos de sus libros,
como su personaje favorito, que no es otro que Tyrion Lannister,
“el más listo”, dice, aunque tampoco se casa con él. El escritor afirma
que le gustan todos, desde los más populares, como Arya y Dany, hasta
Theon y Victarion, a los que mucha gente odia. “A veces aciertan y a
veces meten la pata, pero son mis hijos... Y, probablemente, los únicos
que tenga nunca”, explica.
El autor de la saga fantástica más
popular de nuestra época tampoco tiene reparo en admitir que, hasta la
fecha, lo que más le ha costado de escribir ha sido la Boda Roja.
“Sabía que tenía que hacerlo, pero siempre lo posponía, pues no me
creía capaz de escribir el capítulo. De hecho, acabé primero todo el
libro y luego volví hasta ese punto y cogí el toro por los cuernos. Pero
fue muy difícil...”, revela Martin.