Juan Carlos Arciniegas debía llegar hoy a la ciudad de Mérida para asistir al Festival de Cine Venezolano como jurado.
El presentador de Showbiz, de CNN en Español, era una de las
atracciones del evento que este año celebra su décimo aniversario.
Arciniegas no asistirá por una “recaída médica que lo mantiene en una clínica”,
según se lee en la disculpa que llegó vía correo electrónico, firmada
por su relacionista pública. Debía llegar hoy en avión a Cúcuta (Col) y
trasladarse en carretera hasta Mérida, la única forma de llegar por el problema de pasajes que hay en Venezuela.
El periodista colombiano conversó con Últimas Noticias
el lunes pasado vía telefónica desde Los Ángeles, entrevista en la cual
se mostró emocionado de volver a Venezuela, país que no visita desde la
destitución de Carlos Andrés Pérez en 1993, cuando se dedicaba a la
fuente política.
¿Cómo surge esta invitación al FCV 2014?
He
sido jurado en varios festivales de cine latinoamericanos. Hace tres
años, en Guadalajara, conocí a Karina Gómez Franco, la presidenta del
festival de Mérida, y me extendió la invitación. Finalmente se dio la
posibilidad, que coincide con mi interés por las cosas que están pasando
en Venezuela a nivel cinematográfico, después del Goya a Azul y no tan rosa, que ha conectado bien con la gente. Y finalmente podré ver Pelo malo, que tuvo un gran recibimiento en San Sebastián.
¿Cuándo fue la última vez que vino a Venezuela?
Fui
a cubrir la noticia cuando Carlos Andrés Pérez fue destituido por la
Corte Suprema en 1993. En ese entonces cubría la fuente política. Ahora, en Showbiz, tenemos una gran audiencia de venezolanos que nos siguen activamente en las redes sociales. Hemos hecho muchos amigos.
¿Qué espera de esta visita?
Cuando
me invitan de jurado siempre me toca trabajar bastante, veo tres
películas diarias y termino exhausto. Estoy enterado de lo que está pasando en Venezuela a nivel cinematográfico
y siempre que puedo le doy apoyo a los cineasta en mi programa, porque
creo que les falta apoyo. Es un cine que no cuenta con el presupuesto de
Hollywood.
¿Cómo ve la promoción del cine regional en Latinoamérica?
Hay
un problema de distribución, aunque hay gente trabajando para que el
cine se vea y viaje por América Latina. En cuanto a la promoción, hay
películas que son muy locales, que son exitosas en sus países pero que
tendrían problemas para entenderlas en otras carteleras. Sin embargo,
cintas como Gloria, la chilena, son historias que logran conectar con
cualquier público y deberían viajar por toda Latinoamérica.
¿Qué fue lo último que vio de cine venezolano?
Libertador, de Alberto Arvelo. Quedé satisfecho con el nivel de producción, con la factura. Está al nivel de las películas gringas de este tipo. Ninguno de los bandos políticos de Venezuela podrá apropiarse del argumento de esa película.
¿Cómo ve la política en Venezuela?
La
política me interesa muy poco, por decepción de lo que he visto en mi
país o por incredulidad, hablando de Colombia. La soberanía hay que
respetarla, no tomar partido, es algo que siempre he aplicado. Voy a ver
qué se está haciendo en el cine, no voy a cubrir la situación actual de
Venezuela.
¿Qué piensa de los impasses que han tenido colegas de CNN para trabajar en Venezuela?
No
tengo ninguna opinión. Ellos fueron los que pasaron por esa experiencia
y no conozco los detalles porque no he hablado con ninguno de ellos. Me
declaro apolítico.
El Festival de Cine Venezolano (FCV)
comienza este domingo en la noche y se extenderá hasta el jueves.
Compiten 13 películas, entre las que se encuentran Pelo malo, de Mariana
Rondón, y Papita, maní, tostón, de Luis Carlos Hueck.
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