La imagen de femme fatale no es algo que siempre la acompañó…
Sí, hubo una época en la que ningún chico quería besar a Rihanna.
La cantante barbadense puede presumir estos días de
haberse convertido en el objeto de deseo de numerosos hombres alrededor
del mundo, un honor que debería llenarle de orgullo teniendo en cuenta
que su adolescencia se vio marcada tanto por la estricta educación de su
madre, quien le tenía prohibido salir con chicos, como por el mismo
hecho de que sus compañeros masculinos no tenían ningún interés en ella.
“Mi madre nunca me dejó salir con chicos ni tener una
simple cita. Cuando tenía 13 años me dijo que me olvidara de ese tema,
al menos hasta que tuviera 16, y cuando llegué a esa edad cambió por
completo el discurso. Me dijo: ‘Nunca dije eso, la verdad es que no vas a
tener novio hasta los 40′. Tampoco me importaba mucho, porque ningún
chico estaba interesado por mí en esos tiempos”, bromeó a la revista Teen Vogue.
La etapa escolar de Rihanna
se vio caracterizada por ciertos problemas de autoestima que se
desprendían de su menuda figura, su “escaso pecho” y la mala suerte de
contar con picaduras de mosquito distribuidas por cada centímetro de su
piel. Por tanto, no resulta extraño que la estrella del pop no sienta
nostalgia alguna por los años menos satisfactorios de su pasado.
“La verdad es que tenía la peor combinación posible para
una chica de esa edad. Siempre tuve complejos por mi escaso pecho, ya
que no lo compensaba precisamente con un cuerpo especialmente
exuberante. Pero lo peor eran las ronchas que me salían constantemente
por culpa de los mosquitos”, reveló la polémica artista.