Caracas, 13
de enero de 2014. Las películas venezolanas
“Solo” del director José Ramón Novoa y “Esclavo de Dios” de Joel Novoa Schneider
fueron seleccionadas en competencia para la categoría Película Latinoamericana
del Festival Internacional de Cine de Santa Bárbara SBIFF, California (Estados Unidos).
El Festival se realizará del 30 de enero al 09 de febrero.
Los films
venezolanos competirán con “Algunas chicas” (Argentina) del director Santiago
Polavecino, “Los insólitos peces gato” (México) de la directora Claudia Saint-Luce,
“Caníbal” (España/Rumania/ Francia/Rusia) del director Manuel Martín Cuenca,
“Saudade” (Uruguay) del director Juan Carlos Donoso Gómez, “Sombras de azul”
(Cuba) de la directora Kelly Daniela Norris, “Violet” (España) del director
Luiso Berdejo, “La herida” (España) del director Fernando Franco.
Vale
destacar que José Ramón Novoa ha ganado dos veces en este prestigioso festival,
primero como director con “Sicario” en
el año 1995, llevándose el premio a la Mejor Película, segundo
como productor del film “Punto y raya”, de la directora Elia Schneider, en el
año 2004, ganando el premio de Mejor Película Latinoamericana. Su película “Solo” será estrenada en las
carteleras venezolanas el próximo 04 de abril y cuenta con las destacadas
actuaciones de Laureano Olivarez, Samantha Dagnino y Rebeca Alemán.
En el
caso de Joel Novoa, es la primera vez que participa en este festival con su ópera
prima “Esclavo de Dios”, film que estuvo presente el año pasado en el Festival
Internacional de Cine de Mar del Plata (Argentina) compitiendo
en la categoría de Mejor Película Latinoamericana y ganó dos premios en
Festival de Cine Iberoamericano de Huelva (España). “Esclavo de Dios” ya fue estrenado en su país,
Venezuela, también en Uruguay y Argentina. Recientemente Joel Novoa Schneider, fue el
único venezolano incluido en la revista estadounidense “Variety” entre los
diez cineastas con mayor talento y
futuro en Latinoamérica.
Es de
hacer notar, que Joel Novoa
Schneider, es hijo de José R. Novoa y es
la primera vez que padre e hijo compiten en un mismo festival con películas
venezolanas.