El legendario actor Robert de Niro, que en los 80 hizo del boxeo un
mito con la película ‘Toro Salvaje’, y Sylvester Stallone, que comenzó
su estrellato con la película ‘Rocky’, vuelven al ring más de 30 años
después para luchar su último combate en ‘La gran revancha’, que se
estrenó en Navidad.
A lo largo de la película los espectadores no podrán evitar comparar y
darse cuenta de que Stallone y De Niro ya no son tan jóvenes ni fuertes
como hace décadas, cuando rompieron a puñetazos las taquillas de la
gran pantalla, pero verán que ahora cuentan con la experiencia de los
años y representan otro tipo de papeles.
“Es como casarte con tu mujer por sétima vez, es maravilloso. Ya has
estado ahí pero todavía tienes la frescura suficiente, es
extraordinario”, explicó Sylvester Stallone.
“Yo soy como soy hoy, gracias a lo que fui y me considero muy
afortunado, porque después de 30 años todavía seguimos aquí”, apuntó
Robert de Niro, quien ya había coincidido con Stallone en ‘Copland’.
La película, dirigida por Pete Segal, muestra a dos boxeadores ya
retirados. Stallone representa a Razor, con problemas económicos,
mientras que De Niro encarna a otro boxeador, el orgulloso ‘The Kid’.
Ambos pugilistas detrás de su altivez también tienen asuntos pendientes
que resolver.