La
cantante nacida en Barbados Rihanna, tuvo la osadía de hacer viajar
a su tatuador profesional hasta República Dominicana para que
le arreglara el dibujo que le hicieron en la mano cuando se encontraba
en Nueva Zelanda.
Y es que la estrella no habría quedado satisfecha con el tatuaje morí que le realizaron un tiempo atrás.