La realidad se parece tanto al universo de terror, represión y esperanza de "Los juegos del hambre: En llamas", que "da miedo", explicó en una entrevista con Efe el director de la cinta, Francis Lawrence, que considera que la historia se parece mucho a lo que ocurre en algunos países.
Esta segunda entrega de la trilogía basada en los libros
homónimos que la estadounidense Suzanne Collins, protagonizada de nuevo
por Jennifer Lawrence, Josh Hutcherson y Liam Hemsworth, llega mañana a
los cines de medio mundo, precedida de una enorme expectación.
"Una
de las razones por las que la película ha tocado a la gente es porque
los temas, e incluso algunos elementos visuales, son un espejo de cosas
que están pasando, quizá no en nuestras casas, pero sí lo vemos en la
tele y en internet; sabemos que hay dictadores y revueltas y vemos las
consecuencias", apuntó Lawrence.
Y añadió: "Nos sobrecoge cuando
vemos lo que pasa en Siria por ejemplo, era como un reflejo de las cosas
que estábamos rodando. Cuando tienes un gobierno así y se produce una
rebelión, y no estás muy seguro de quién es mejor que quién, porque hay
una zona muy grande y muy gris, lo que pasa es que da miedo; eso también
se ve en la película".
Lawrence, que tímidamente apunta alguna
palabra en español ("mi mujer es navarra", confesó a Efe), retomó la
dirección de la saga cinematográfica después de que Gary Ross abandonara
tras rodar la primera parte, "Los juegos del hambre", que no tuvo muy
buenas críticas cinematográficas, pero arrasó en taquilla.
"No
presté mucha atención a las críticas (...) cuando me llamaron me lo tuve
que pensar, porque nunca había hecho una secuela, pero había leído los
libros -"vi la película", aclaró-, y pensé en qué podía crecer yo, qué
podía aportar, pero también había un 'casting' increíble y una estética
que cambiaba y aumentaba".
Esta segunda parte le ofrecía "mucho
más; es cuando la historia se abre realmente y podemos empezar a
explorar lo auténtico de los libros, e indagar en el aspecto sentimental
de los personajes, que también era distinto", indicó.
En "En
llamas", un truco del presidente Snow (Donald Sutherland) vuelve a
llevar a Katniss (Jennifer Lawrence) y a Peeta (Josh Hutcherson) a los
juegos del hambre (un maquiavélico concurso televisado donde solo
sobrevive un competidor), pero los habitantes de los distritos ya han
convertido a Katniss, "la chica en llamas", en su esperanza para
derrocar la asfixiante dictadura en que viven.
"Katniss es muy
introvertida, pero por fin se encuentra en situaciones donde tiene que
mostrar sus emociones", comentó a Efe Jennifer Lawrence, satisfecha de
interpretar a alguien tan fría porque "es un reto".
"Me identifico
con ella por ejemplo cuando vuelve a casa y la gente le trata como si
fuera otra, pero ella no se siente así; a veces me ha pasado lo mismo en
estos últimos meses", explicó sobre la reacción a su recién ganado
Óscar por "Silver Lining Playbook".
Siempre se necesita una
heroína, considera la protagonista de "Winter's Bone", y más la
generación actual, opinó. "La gente tiene que luchar constantemente por
su libertad", resumió desde sus 23 años, a lo que el director añadió que
"sin perder de vista las consecuencias de una guerra".
Los
protagonistas masculinos, Josh Hutcherson y Liam Hemsworth (Gale)
comparten apasionamiento, inconformismo, fidelidad y que son buenas
personas, explicaron ambos a Efe.
"Me identifico mucho con Gale
porque lucha por lo que cree y no se conforma con una situación
intolerable", apuntó Hemsworth, a lo que Hutcherson agregó que "los dos
se mantienen fieles a lo que creen y defienden a muerte a sus familias".
Respecto
a la distopía que muestra la trilogía, Hutcherson consideró que "es una
idea muy extrema de futuro, pero no es tan lejana ni tan ajena a la
raza humana. Hay tenemos a Hitler...".
En el reparto repiten
Stanley Tucci, Elizabeth Banks, Woody Harrelson y Lennie Kravitz y se
suma Philip Seymour Hoffman, que en su papel de Plutarch Heavensbee
tendrá mayor protagonismo en la tercera y última parte de la trilogía,
"Sinsajo", de la que se harán dos películas, al modo de otras sagas de
éxito, como Harry Potter o Crepúsculo.