El fin de semana en El Nacional
comenzó con el revuelo que causan las historias de éxito y a casa llena
cuando decenas de personas, incluso de lugares tan distantes como
Maracaibo y Caruaro, se acercaron a la sede del diario en Los Cortijos
para asistir al bautizo de El poder de escuchar, el primer libro de Ismael Cala, periodista de CNN en Español.
“Cala
es muy querido y respetado en Venezuela”, dijo Miguel Henrique Otero,
presidente editor del periódico, y mientras la gente aplaudía agregó:
“Por eso queremos darle la bienvenida y presentarles esta publicación en
la que escribe cómo a pesar de todas las adversidades de su vida pudo
llegar al Cala de la televisión que todos conocemos”.
Cuando
le tocó el derecho de palabra, Cala señaló que era un placer estar en
un país que quería tanto y agradeció que sus fanáticos vinieran de todas
partes de la nación a verlo y a que les firmara el libro. Refirió
además cómo su obra, editada en agosto en Estados Unidos por Penguin, no
llegó a Venezuela. Las dificultades para adquirir divisas en el país
terminaron por convertir la experiencia de Cala en el país en una muy
especial, porque al no tener cómo comercializar su libro aquí consiguió
en Libros El Nacional “la plataforma perfecta de promoción y
distribución de El poder de escuchar”. Señaló que, por eso,
debería tener un subtítulo esta edición: “El poder de esperar”. Cuando
lo escucharon decir esto último, algunos asistentes rieron por
considerarlo un chiste político.
Refiriéndose
a su libro, el presentador de televisión dijo que la enseñanza que
quería que sus lectores se llevaran de esa publicación es que “todos, si
se lo proponen, pueden llegar a donde quieran”, sin importar dónde
estén. “La clave para lograr tus metas es creer en ti mismo y nunca
darle el poder a alguien de hacerte daño o impedirte cumplir tus
sueños”, expresó refiriéndose también a la conferencia que tendrá el
domingo titulada Inspirando lo Humano hacia el Éxito.
Luego
de que con espumante bautizaran el libro comenzó a hacerse una cola que
le daba la vuelta al lobby de la sede corporativa de El Nacional y la gente aprovechaba para hablarle a Cala y tomarse fotos con él. El poder de escuchar
–que ya muchos de los asistentes habían comenzado a leer mientras
esperaban a que empezara la presentación– ofrece al lector herramientas
muy útiles para comprender de dónde sale la frescura y la naturalidad
que pueden percibirse en las entrevistas del periodista nacido en Cuba
en 1969.
