El hotel donde se hospedó en Auckland le hizo firmar un contrato con una particular cláusula.
Justin Bieber dio su primer recital en Australia luego de haber pasado por el país vecino de Nueva Zelanda.
Pues resulta que el diario Daily Star dio a conocer el
contrato que el hotel Langham de Auckland, de N.Z., le hizo firmar al
canadiense. Después de todos los escándalos en Brasil y Argentina por
sus cuestionables actividades nocturnas, los responsables del hotel
idearon un estricto código de comportamiento para evitar cualquier tipo
de polémica durante su estadía en el país austral el fin de semana
pasado.
La intención era cuidar la reputación del establecimiento.
“Justin será expulsado del hotel si no
cumple con las reglas que se han acordado. Teniendo en cuenta que el
hotel Langham es uno de los mejores de todo el país, a quienes lo
gestionan no les importa absolutamente nada que sea Justin Bieber o cualquier otra celebridad quien les vaya a visitar. Por eso, el equipo de Justin
recibió un documento que explica de forma minuciosa todas aquellas
prácticas que tendrá que evitar a toda costa a riesgo de que le echen a
la calle. No podrá beber alcohol dentro de las instalaciones, ni traer
invitados personales. Y desde luego, no podrá perturbar la tranquilidad
de otros clientes”, reveló al Daily Star una fuente cercana al artista.
Aunque el cantante canadiense desembolsó más de 1.000
dólares diarios por su estancia en Auckland, parece que su estadía allí
estuvo lejos de ser el descontrol que generó en Río de Janeiro y Buenos
Aires.
“Justin y su séquito se han visto
obligados a someterse a esas condiciones porque no hay muchos hoteles en
la zona que sean tan apropiados para gestionar el tema de la seguridad.
El equipo de Justin mantuvo reuniones con la gente del
hotel para coordinarse en este sentido, y estos últimos fueron
advertidos de que debían tener los ojos muy abiertos ante lo que Justin
pudiera hacer”, expresó el mismo informante haciendo referencia a las
frecuentes salidas nocturnas que suele protagonizar el cantante sin
avisar a sus guardaespaldas.
Por suerte, parece ser que todo transcurrió con normalidad ya que no hubo reportes de incidentes el propio Bieber se despidió del país a través de su cuenta con un cálido mensaje: “Gracias N.Z. por hacerme sentir como en casa”.