Aunque ya
nos estaba acostumbrando a lucir prendas holgadas, es imposible
imaginarse a Kim Kardashian tapando sus voluptuosas curvas. Es bueno
saber que de nuevo viste ropa entallada y sus conocidos escotes que
hacen gala de los grandes atributos de la socialité.
Como así
sucedió en su visita a París, Kim acompañó a su amorcito Kanye West a un
evento de moda, donde el ajustado atuendo y la transparencia de la
parte superior fue el principal atractivo de esa noche. Se sabe que
esta fue la primera vez que Kardashian se separa de su pequeña North
West, desde el nacimiento de su retoño.