Pocas semanas después de confirmar que volverá a integrarse en el
panel de jueces del popular concurso 'American Idol', la estrella
neoyorquina ha decidido hacer algunos cambios en su rutina profesional
para comenzar su nueva etapa con energías renovadas, aunque eso haya
implicado alterar sustancialmente la composición de su equipo de
colaboradores.
Desafortunadamente para su ya exagente Mark Young
--conocido por su gestión del escándalo protagonizado por Jennifer Lopez
al actuar para el dictador de Turkmenistán--, la primera medida tomada
por la artista ha consistido en prescindir de sus servicios de manera
fulminante y, posteriormente, firmar por una agencia de representantes
cuyas oficinas en Nueva York y Los Ángeles permitirán a la diva del
Bronx tener cubiertas las espaldas en las dos ciudades que más visita a
lo largo del año.
Según explica un portavoz de la famosa
intérprete al portal The Hollywood Reporter, la idea de terminar su
relación laboral con Mark Young no está en absoluto relacionada con la
forma en que este manejó toda la crisis mediática del concierto de
Turkmenistán, sino con el deseo de Jennifer de contar con representantes
lo suficientemente experimentados como para lidiar con el variado
abanico de actividades que desarrolla: su carrera musical, su faceta
cinematográfica y, sobre todo, sus labores como empresaria cuyo producto
estrella es su propia imagen.
No obstante, la decisión de
despedir a un empleado con el que llevaba trabajando estrechamente desde
los últimos tres años se ha visto asociada con rapidez a las últimas
declaraciones de la estrella con respecto al desastre de Turkmenistán
--Jennifer cantó el 'cumpleaños feliz' al mandatario del país generando
todo tipo de mofas y paralelismos con la actuación de Marilyn Monroe
para el presidente Kennedy-- ya que en ellas la vocalista se lamentó
públicamente de un grave "error" que no volvería a repetirse.
"Soy
consciente de que tengo que responsabilizarme de mis actos si quiero
mantenerme como un modelo de conducta. Soy humana y, como todo el mundo,
cometo muchos fallos, pero también puedo decir que cuando me caigo
siempre termino levantándome y enmendando los errores. Cuando estoy
equivocada, aprendo la lección y sigo adelante para afrontar otros
desafíos. Ese es el verdadero sentido de la vida: hacer tu trabajo lo
mejor posible y seguir mejorando día a día. Siempre estoy dispuesta a
cambiar", aseguraba la diva a la revista Cosmopolitan.