Con clásicos del cancionero romántico norteamericano y temas que
marcaron su despegue a nivel internacional, Gloria Estefan regresa al
ruedo discográfico con The Standars (Sony
Masterworks), su vigésimo séptimo álbum, en el que la propia Gloria, su
esposo Emilio Estefan y el pianista Shelly Berg fungieron como
productores.
El anuncio fue hecho durante la conferencia de prensa
efectuada el martes en un hotel de Brickell, en Miami, donde la
cantante expresó su satisfacción por compartir con sus seguidores “el
privilegio” de realizar un trabajo musical a la medida de sus deseos.
“Uno
hace lo que siente musicalmente [en cada momento]”, dijo Estefan. “Y si
bien la música siempre me ha servido de catarsis a lo largo de mi vida,
siento que es un privilegio compartir esta idea musical con mi
público”.
En el encuentro, conducido por la periodista Leila Cobo, de la revista Billboard,
ésta destacó que Estefan es una de las cantantes cuyos números han
encabezado los primeros lugares de preferencia en la publicación.
Según aseguró la intérprete, The Standars “cierra un círculo” en su vida a 35 años de su boda con Emilio Estefan y “con un nieto en los brazos”.
“Los clásicos siguen diciéndole algo a la gente”, aseveró Estefan, tras recordar que la versión de Roberto Carlos del tango El día que me quieras fue la primera canción que bailó con Emilio el día de su boda.
The Standars, que sale a la venta el martes 10, incluye The Day You Say You Love Me, la versión en inglés del tema escrita por la cantante.
Entre otros títulos, el disco incluye What a Wonderful World, un viejo éxito en la voz de Louis Armstrong, y Young At Heart, uno de los himnos de Frank Sinatra.
Esta no es la primera vez que Estefan se acerca al cancionero clásico norteamericano. Lo hizo en Duets (1993), un disco de Sinatra en el que cantó Come Rain Or Come Shine, y en Viva Duets (2012) en el que unió su voz a la Tony Bennett en Who Can I Turn To ( When Nobody Needs Me).
Y
tal como lo hizo en el pasado con Luciano Pavarotti, Plácido Domingo,
BB King y José Carreras, en su nuevo trabajo la intérprete cuenta con
tres invitados de lujos: el violinista Joshua Bell, el saxofonista Dave
Koz y la cantante Laura Pausini, con quien cantó Smile, la archiconocida canción de Charlie Chaplin, interpretada en inglés e italiano.
Durante
el diálogo con los medios Estefan recordó que creció escuchando la
música de antaño. De ahí que sienta “un sentimiento especial” ante las
canciones de Nat King Cole, Johnny Mathis y aquellos temas de películas
de antaño.
“Mi madre fue la primera en conocer las canciones de
este disco. Mientras las escuchaba en la cocina de mi casa, lloraba
pensando en mi padre”, reveló la cantante, tras confesar que siendo niña
se las cantaba a su familia acompañada de su guitarra.
“Esas
canciones se convirtieron en mi forma de ver la vida. Cada vez que las
escucho me hacen sentir muy bien”, agregó la intérprete, tras anticipar
que al repasar el repertorio del trío Los Panchos, que también está
inscrito en sus memorias infantiles, ha pensado en hacer un disco en
español.