El cúmulo de altercados que ha protagonizado Justin Bieber en los últimos meses le están pasando factura. Tanto que han llevado al juez estadounidense que investiga el caso a plantearse prohibirle la entrada al cantante a Estados Unidos y su consecuente deportación.
Si esta medida se llevase a cabo el cantante perdería bastante dinero, ya que sus fans americanas son las que más conciertos demandan y las que más discos compras. Además la firma de contratos que requieren de sus presencia en este país, según ha informado «E!News».
Y es que la gota que ha colmado el vaso ante la justicia ha sido la paliza
que el cantante y sus guardaespaldas le dieron a un hombre a la salida
de una discoteca. Aunque Bieber asegura que no se encontraba en aquel
lugar, muchos testigos afirman haberle en la pelea.