Comer 4 mil calorías al día. No ingerir azúcar ni carbohidratos.
Despertarse en la madrugada sólo para tomar licuados de proteína.
Abstenerse de beber agua 36 horas antes de algunas escenas para así
lograr mayor definición muscular ante la cámara. Ejercicio... mucho
ejercicio: levantamiento de pesas, correr, yoga y pilates.
Todo esto hizo Hugh Jackman para transformar su cuerpo y lograr una vez
más la estética de Wolverine, personaje que ya interpretó varias veces
en la saga de X-Men, en el spin-off ‘X Men Orígenes: Wolverine’ y ahora
en la más reciente entrega, ‘Wolverine Inmortal’, que se estrena el 26
de julio.
“Cuesta demasiado trabajo verse así. La dieta es tan estricta que mi
único vicio permitido es el café... pero sin azúcar. Mantener esta masa
muscular y sobre todo la definición es muy desgastante”, revela Jackman
en entrevista desde Montreal, Canadá.
Él viste una playera negra que le queda apretada y que deja ver sus
bíceps musculosos a tal punto que, simplemente cuando mueve sus manos y
brazos al hablar, sus venas brincan como si fueran pequeñas serpientes
azules que se hinchan.
Su cambio físico es drástico si se toma en cuenta que un año atrás para
‘Los Miserables’ tuvo que perder 6 kilos. En cambio ahora, para esta
película de acción, adaptada de los comics de Stan Lee, el australiano
de 44 años subió 11 kilos de masa muscular.
Sin embargo, el desafío al protagonizar este filme dirigido por James Mangold no sólo fue físico.
Para poder encarnar a Wolverine, Jackman tuvo que reflejar frente a la
cámaras constantemente un rango de emociones que están en el extremo
opuesto de su personalidad liviana y tranquila, pues en esta nueva
entrega el mutante de garras de metal adamantio está desencantado con la
vida y pasa sus días consumido por su temperamento colérico.
“Mi hijo de 13 años (Oscar Maximillian) me dijo: ‘En realidad no tienes
el carácter de Wolverine, sólo te pareces a él, eso es todo’. Lo que es
my cierto”, revela Jackman.
Por eso, para estar a tono con el carácter de su personaje, Jackman se
impuso como rutina zambullirse todas las mañanas en el helado mar de
Australia porque al someter su cuerpo a ese cambio de temperatura
drástico lo hacía sentirse furibundo y alerta, como Wolverine, y esto lo
ponía en un estado mental idóneo antes de actuar.
Fue así como el actor se preparó para retratar a Wolverine en uno de
los puntos más bajos de su vida. El mutante vive como un marginado,
alejado de cualquier contacto posible con los humanos, y se siente
maldito por su condición de ser inmortal. Debido a su poder sobrehumano
es que su tejido y órganos se regeneran.
Sin embargo, en este filme, en el que también actúan Famke Janssen y
Will Yun Lee, el paradigma de Wolverine cambia cuando viaja a Japón y
pierde sus poderes de mutante y se ve obligado a batallar sabiendo que
cada pelea puede ser la última de su vida.
¿SABÍA QUE...?
• Hugh Jackman llegó a cargar hasta 140 kilos haciendo press de pecho.
• La primera opción para interpretar a Wolverine era Russell Crowe, pero éste declinó la oferta y recomendó a Jackman.
• Ésta es la sexta vez que Jackman se adueña del personaje de Wolverine.
• Para prepararse físicamente, Jackman le pidió consejos al actor Dwayne ‘La Roca’ Johnson.
Motivo de burla
“Se siguen burlando de mí en el set”, explica Hugh Jackman, casado desde hace 17 años con Deborra-Lee Furness.
¿La razón? Cuando Jackman se preparaba para interpretar por primera vez
a Wolverine, inspirado en un carnívoro pequeño y musculoso que habita
en bosques fríos, él no sabía de su existencia.
“Cuando hice X- Men estaba tratando de crear el personaje y recuerdo
que para eso fui a ver una película sobre lobos y también vi muchos
documentales. Un día Bryan me dijo qué hacía viendo lobos y yo le
respondí que estudiándolos. El me dijo: ‘¡Pero no eres un lobo; eres un
Wolverine, es un animal que se llama así’. Fue muy penoso”.