La cantante Jennifer Lopez debe donar las
ganancias del concierto que ofreció al presidente de Turkmenistán a una
organización de caridad que apoye a las víctimas del régimen de este
país, apuntó hoy Human Rights Watch (HRW) .
En un comunicado, el organismo de defensa de los derechos humanos indicó
que Lopez podría así reparar el daño causado al ofrecer el 29 de junio
un concierto para celebrar el cumpleaños del presidente Gurbanguly
Berdymukhamedov, que gobierna Turkmenistán con "puño de hierro" .
"El gobierno de Turkmenistán tiene un terrible historial de tortura, y ha virtualmente silenciado a los activistas de derechos humanos que han tratado de alzar la voz" , dijo Carroll Bogert, subdirectora ejecutiva de relaciones externas de HRW.
Bogert opinó que el donativo mostraría que la cantante -que no sabía de
los problemas de derechos humanos en Turkmenistán, según su publicista-
comprende ahora la razón por las que tantas personas se sintieron
ofendidas por el concierto.
De acuerdo con HRW, Turkmenistán es uno de los países más cerrados en el
mundo, sin medios de comunicación o partidos políticos independientes,
sin libertad de expresión o asociación y prácticamente sin acceso a
monitores externos.