Siempre
impecable, de punta en blanco. No en vano, la etiqueta de su vestimenta
la delataba, y era parte de la reciente colección del diseñador español
Alfredo Domínguez. Así encontramos a la animadora venezolana Maite
Delgado, a la salida de un evento corporativo en Caracas.
Con su característica voz “ronquita”, la mirada atenta y una personalidad que irradia por sí sola las luces de los escenarios y estudios de televisión que durante tanto tiempo condujo. En el pasado fue mujer de pocas entrevistas, pero quedó atrás y ahora no dudó en responder a todas las preguntas de PANORAMA.
—¿Cómo describe la etapa personal y profesional que vive ahora?
—Estoy andando. Me siento muy contenta porque Dios está en el camino y me alumbra todos los días y cada vez me siento más segura y feliz. Tengo unos hijos hermosos y una familia maravillosa, además sigo siendo una mujer muy activa en la publicidad de mi país.
—¿Cuándo la veremos de nuevo en la televisión?
—Estoy con el proyecto de la segunda temporada del show de Maite, pero aunque eso va no quiero prometer fechas ni nada oficial porque eso depende un poco de las fechas complicadas de los artistas. Yo no quiero hacer un programa de entrevistas normales sino que sea distinto. Estoy ilusionada y nunca pierdo el gusanito por crear cosas diferentes.
—¿Qué personajes le gustaría entrevistar para su espacio?
—Hay muchos interesantes, pero prefiero no decirlos porque hay espías en Venezuela y se me pueden adelantar. Por lo pronto, estoy negociando la primera temporada del show de Maite en Colombia y Latinoamérica.
Haré unos contactos en Bogotá aprovechando la invitación al programa de Andrés López.
—¿Es usted muy exigente con la televisión venezolana o se cotiza muy alto?
—Yo no creo sea un tema de cotizarme muy costosa. Ahora simplemente quiero disfrutar el tiempo para trabajar en la televisión a mi ritmo y dentro de un formato o estilo con el que me identifique y me sienta bien.
—Yo no creo sea un tema de cotizarme muy costosa. Ahora simplemente quiero disfrutar el tiempo para trabajar en la televisión a mi ritmo y dentro de un formato o estilo con el que me identifique y me sienta bien.
—¿Es crítica de pantalla nacional?
—Si veo la televisión porque hay que hacerlo para conocer y opinar. Me gusta mucho lo que está sucediendo en las mañanas con Portada’s (VV), La Bomba (Televen) y Mamma Mía (LaTele). Siempre he considerado que la calidad es producto de la competencia y si a ‘Sábado en la Noche’ (Globovisión) le ponen otro espacio en otro canal ya no estarían tan tranquilos y cómodos.
—¿Cómo es la televisión que a usted le gusta?
—Es aquella que vende fantasía al público televidente y para nadie es un secreto que actualmente hay una crisis de inversión en la pantalla venezolana.
La fantasía cuesta dinero y a veces los canales se van por lo más fácil o menos costoso en estos tiempos.
—¿Ya confirmó su participación especial en el próximo Miss Venezuela?
—No. En realidad estoy fuera de la conducción del certamen desde hace tres años y me entero que todo el mundo dice que, voy a estar… Lo he reflexionado mucho y lo resumo con una frase: ‘Nunca me planifiqué no estar en el Miss Venezuela, pero un día Dios decidió que debía irme por otro camino.
No me planifico volver, pero existe un Dios y yo tengo una larga historia.
—¿Cómo se sintió en Venevisión para el homenaje a Joaquín Riviera?
—Cuando salí del canal dejé las puertas abiertas y por lo tanto no sentí ni rabia, dolor o tristeza.
Volví porque me llamaron para algo especial, pero igual puedo regresar a Televen a quienes les agradezco la maravillosa oportunidad reciente que me dieron sus dueños, la familia Camero y sus empleados.
—¿Ha pensado hacer de su nombre un perfume o línea de ropa?
—Ahora hay mucha gente famosa haciendo perfumes, escribiendo libros y sacando líneas de ropa. Yo prefiero esperar y llegará el momento porque no tengo apuros con las cosas buenas que puedan seguir sucediendo en mi vida.
—¿Es verdad que su amigo Juan Gabriel viene pronto a Venezuela?
—No sé, pero te aseguro que si viene a cantar yo sería la primera fan que estaría presente para verlo y aplaudirlo. Le agradezco su amistad sincera para conmigo.