La estrella televisiva dio la bienvenida a su hija North West
el pasado mes de junio y desde entonces está tan encantada con su
pequeña, que está tratando de hacer todo lo posible por aplazar su
vuelta al trabajo con el objetivo de exprimir al máximo el tiempo que
tiene disponible para disfrutar de su primogénita.
Tanto es así, que los allegados a la pareja aseguran que a Kanye West
ha empezado a molestarle el hecho de que tenga que acudir en solitario a
los numerosos eventos sociales a los que normalmente ambos asistían
juntos, hasta el punto de que el rapero se habría mostrado como
"ausente" en la fiesta que recientemente organizó su amigo Jamie Foxx.
"Kim está disfrutando mucho de su primera experiencia maternal,
y le encantaría congelar para siempre estos primeros días tan
maravillosos que está pasando con su bebé. Kanye también se encuentra
completamente hipnotizado por su pequeña, y admite que no se siente nada
cómodo dejando en casa a su prometida y a su hija para cumplir con sus
compromisos sociales. Hace poco Kanye asistió a la fiesta del actor
Jamie Foxx y casi no se relacionó con nadie. Estuvo como ausente todo el
rato, pendiente del teléfono para asegurarse de que las dos mujeres de
su vida se encontraban bien. Odia tener que dejarlas solas en casa",
reveló al portal HollywoodLife un miembro del círculo cercano al cantante.