"La belleza que atrae rara vez
coincide con la belleza que enamora", dijo el filósofo José Ortega y
Gasset. Y si aplicamos esta afirmación al mundo del papel couché
encontramos varias mujeres que no se han fijado precisamente en la
belleza física a la hora de escoger pareja.
Una de ellas es Lara Lieto, la novia del oscarizado Adrien Brody. La
primera vez que se les vio coquetear fue en mayo del pasado año en el
Festival de Cannes y, desde entonces, se han hecho inseparables.
La modelo bien podría confundirse con Rapunzel (la princesa de cuento
que, desde lo más alto de la torre, lanzaba su trenza para que el
príncipe trepara por ella) ya que luce una larguísima melena que le
cubre hasta la cintura.
Con este look tan característico y ataviada con un espectacular
vestido acudió junto a Brody al festival de Roma a finales de 2012, lo
que muchos medios entendieron como la presentación oficial de su
romance. Varios meses después, las fotografías de la pareja muestran que
la relación sigue viento en popa.
Un hombre envidiado
Otra pareja consolidada es la que forman Carlos Bardem y Cecilia
Gessa. La actriz, antes conocida como Celia Blanco, decidió colgar las
botas en el cine para adultos y dedicarse a otros menesteres.
Según refleja el sitio web divinity.es, Gessa, “además de hacer sus
pinitos como actriz dramática, intenta labrarse un camino como
organizadora de eventos culturales”.
Carlos y Cecilia empezaron a salir en septiembre de 2010 y, desde
entonces, se han dejado ver, felices y enamorados, en fiestas, estrenos
de cine o, simplemente, paseando por las calles de Madrid.
Aunque el hermano mayor de Javier Bardem no tiene el aspecto de los
galanes que suelen aparecer en las películas, parece contar con un
talento especial para conquistar a mujeres muy hermosas, ya que antes
que Gessa, pasaron por su vida Dafne Fernández y la húngara Agnes
Kiraly.
La bella y la bestia
Pero el hombre más envidiado debe de ser el francés Vincent Cassel,
casado desde hace más de 10 años con Mónica Bellucci, una de las mujeres
más bellas del mundo. Lo cierto es que no se puede decir que Cassel sea
un hombre feo, pese a que interprete a la Bestia en La Bella y la
Bestia, lo que ocurre es que al lado de Mónica Bellucci cualquiera queda
eclipsado.
Según publica la revista Mujer Hoy, la actriz italiana reconoce que
la pasión se puede sentir por el peor de los hombres, pero que eso nada
tiene que ver con la amistad profunda y el compañerismo. “La pasión
queda, pero es más importante la confianza, el respeto”, afirma
Bellucci.
Puro físico
El psicólogo José Manuel Aguilar explica que "una relación de más de
tres meses no se puede basar en la apariencia física". Para este
experto: “La primera atracción siempre es la parte externa, pero una
relación consolidada tiene que tener otros valores”. En este sentido,
Aguilar sostiene que “lo difícil de una mujer no es acostarse con ella,
sino desayunar” y aclara que esta afirmación puede aplicarse a
cualquiera de los dos géneros.
Para el psicólogo, una relación a largo plazo “está mucho más cerca
de una amistad profunda con relaciones sexuales que de una cosa que se
llame amor”. Aguilar comenta que la belleza física no interesa si la
persona con la que se tiene una relación no nos llena a largo plazo.
“Las mujeres más hermosas y los hombres más fantásticos terminan
convirtiéndose en personas corrientes con el tiempo”, concluye.
Nota Diario la Verdad