Cuando la estrella colombiana quiere algo, mejor es cumplir sus deseos…
Aunque su éxito televisivo la ha convertido en una de las figuras más deseadas en todo tipo de evento social, Sofía Vergara
demuestra que su privilegiada posición en la industria del espectáculo
no ha transformado un ápice de su extrovertido carácter, una naturalidad
que volvió a poner de manifiesto este fin de semana en una exclusiva
fiesta que reunió a políticos, empresarios y demás millonarios en una
mansión de la turística zona de los Hampton (en la costa de Nueva York).
Cansada de la repetitiva música ambiental que reproducía el
pinchadiscos contratado para el encuentro, Sofía se acercó a su cabina
para pedirle que animara un poco la velada con las pegadizas melodías
del rapero cubano Pitbull –uno de sus artistas
preferidos–, y no dudó en gritar el nombre del músico tantas veces como
fuera necesario hasta que el DJ finalmente se enterara de la persona a
la que hacía referencia la actriz.
“Llegó un momento en el que Sofía se hartó de la música tan aburrida
que estaba mezclando el DJ, por lo que no dudó en acercarse a él para
persuadirle de que pusiera las canciones que a ella le gustaban. Pero el
volumen de la música y el fuerte acento de Sofía impidieron que el
pinchadiscos se enterara de lo que estaba diciendo, por lo que ambos
pasaron un buen rato discutiendo y tratando de comprender lo que el otro
le decía”, informó un testigo de la escena al diario The New York Post, antes de revelar que en esta ocasión la artista no logró salirse con la suya.
“El DJ acabó bastante cansado de la insistencia de Sofía, y acabó
zanjando la conversación diciéndole que no tenía ni idea de quién era
Pitbull”, explicó la misma fuente.
A pesar de que la mediática intérprete no logró familiarizar a los
ilustres invitados con el caribeño estilo del músico, la protagonista de
la popular serie Modern Family exhibió durante el lujoso evento la solidez de su romance con el empresario Nick Loeb,
con quien previsiblemente pasará por el altar el próximo año y tratará
de repetir en la maternidad. La pareja mantuvo una animada conversación
con personalidades tan influyentes como David Patterson –exgobernador
demócrata de Nueva York– el financiero Marc Leder y el multimillonario
Jeff Green, a quienes Sofía impresionó precisamente por su simpatía y
por el hecho de no sentirse intimidada ante tantos hombres poderosos.
Sin embargo, todavía se desconoce si fue Nick Loeb el que abochornó a
su pareja en algún momento de la fiesta, dada su afición a promocionar
el artículo estrella de su compañía –el preparado de cebolla Onion Crunch–
en cualquier tipo de cena o acto social de grandes proporciones.
Recientemente, la popular estrella televisiva tuvo que presenciar
avergonzada cómo su prometido repartía muestras de su calórico producto
entre los distinguidos comensales del hotel neoyorquino Four Seasons, una forma de promoción que no tuvo el éxito esperado entre el difícil público del comedor.