Los diseñadores italianos Domenico Dolce y Stefano Gabbana fueron condenados el miércoles a 20 meses de prisión suspendida y una cuantiosa multa por evasión fiscal.
A
los diseñadores —quienes siempre negaron los cargos— se los encontró
culpables de ocultar cientos de millones de euros a la autoridades
fiscales italianas. Ninguno de los dos estuvo presente en la corte de
Milán en la que se les impuso la pena, y apelarán el fallo.
"Leeremos las razones del veredicto apelaremos", dijo Massimo di Noia, unos de los abogados defensores, durante la audiencia, informó la agencia Reuters.
La
pena impuesta a Dolce y Gabbana es menor que la que había pedido el
fiscal que, según el reporte de Reuters, era de dos años y medio de
prisión para el dúo de diseñadores. Sin embargo, tendrán que pagar una
primera cuota de 500.000 euros como parte de una multa que podría llegar
a 10 millones.
Tanto Dolce como Gabbana fueron absueltos del cargo de haber presentado declaraciones fiscales incorrectas.
La
investigación que derivó en este fallo se remonta al año 2008, cuando
la justicia italiana comenzó a actuar contra la evasión fiscal, al mismo
tiempo que la crisis golpeaba a ese país. El juez indicó que los
diseñadores vendieron su marca a una sociedad financiera de Luxemburgo
en el año 2004 para evitar declarar impuestos sobre ganancias de
alrededor de 1000 millones de euros.
El mismo miércoles, la
reacción de Gabbana al fallo se hizo sentir a través de Twitter, donde
el diseñador retuiteó varios mensajes de apoyo, algunos de los cuales
cuestionaban al gobierno mientras que otros llamaban a lo ocurrido "una
injusticia".