Una vez más Brad Pitt demuestra que no solo es uno de los actores más guapos del mundo, sino que también es uno de los más generosos.
La
noche del martes el actor cenó junto a su pareja, Angelina Jolie, y los
seis hijos de ambos en un restaurante japonés en Berlín, y para
sorpresa de la camarera que los atendió, Pitt le dejó una propina de
nada menos que 738 dólares.
“Son maravillosos. Llegaron a las
nueve de la noche y dejaron sus zapatos en la entrada como todos los
clientes”, dijo la camarera Undine Orth al tabloide alemán Bild.
La familia —que se encontraba en ese país por la premier de la nueva película de Pitt, World War Z— fue al restaurante para celebrar el cumpleaños de Angelina.
Según
la camarera, Brad ordenó varios platillos del menú para que su familia
pudiera degustar las delicias japonesas que ofrece dicho
establecimiento.
“Me temblaban las piernas cuando Brad Pitt se me
acercó. Compartí la propina con mis quince compañeros de trabajo”,
aseguró Orth.