El cantante y su anillo de seguridad volvieron a protagonizar problemas…
Justin Bieber se encontraba de fiesta en la discoteca Passage
de Viena durante el pasado fin de semana tras su concierto en la
capital austriaca cuando sus guardaespaldas rompieron las cámaras y
teléfonos celulares de los fans que intentaban sacar fotos al joven
ídolo.
“Justin Bieber ya no es bienvenido en este local”, explicó el gerente de la discoteca, Joachim Bankel al periódico Austrian Times.
Algo muy parecido a lo que le pasó en su cumpleaños…
Parece que desde la polémica que levantó durante su gira por el Reino
Unido –en la que llegó dos horas tarde a su primer concierto en Londres
y donde tuvo además un altercado con un fotógrafo–, el joven cantante
no deja de atraer problemas, a los que se suma la incautación de su mono
en una aduana de Alemania. Recientemente, su compañero y colaborador will.i.am insistió en que la madre del artista, Pattie Mallette, se hará cargo de que su hijo esté bien en estos difíciles momentos.
“Es peligroso ser una estrella juvenil, pero también es peligroso ser
un niño que vive en un barrio marginal, o que es acosado en su escuela.
Si cuentas con el apoyo de tus padres, estarás bien y la madre de
Justin es maravillosa”, explicó el artista.
¿Esta será solamente una etapa de Justin o nos tendremos que acostumbrar a la nueva versión del cantante canadiense?
Articulo de E! Online