Un sueño americano, logrado con talento y empeño, es la vida de Andrés
“Andy” García Menéndez, nacido en La Habana el 12 de abril de 1956. Tras
arribar Castro al poder emigró a Miami con sus padres, un abogado y una
profesora. Comenzó a actuar cuando estudiaba en la FIU y partió a
Hollywood decidido a triunfar. Sus breves apariciones en películas se
convirtieron en roles de mayor importancia, y en 1990 es nominado al
Oscar por el papel de Vincent Corleone en El Padrino III. De gran atractivo y fuerza interpretativa, con medio centenar de filmes, Andy es también el director de cintas como Cachao... Como su ritmo no hay dos y The Lost City.
Muy respetado y celoso de su privacidad, este sexy caballero lleva en
la sangre la música cubana y en el alma su herencia hispana, pero su
arte es universal.