Stephenie Meyer ha vuelto con "The
Host (La huésped)", filme basado en su novela y en el que la nueva
mitología de la demiurga de "Crepúsculo" inventa criaturas imaginarias
que acercan a los conflictos humanos. "Me gusta la ciencia ficción que
me hace sentir más real", ha dicho a Efe.
La relación de Stephenie Meyer con la realidad cambió al dar un
volantazo a su vida de estadounidense convencional. Hasta 2005 había
estudiado Filología Inglesa, ejercía de recepcionista, y criaba a sus
hijos, pero, entonces, escribió lo que sería el inicio de una
multimillonaria carrera literaria.
"Era madre de niños pequeños, no tenía mucho tiempo para pensar y era
más un día a día de supervivencia. Entonces busqué una vía de escape,
quería volver a cuando era joven y al primer amor... Y escribí
'Crepúsculo'", explica en una entrevista en Madrid.
A partir de ahí, 100 millones de libros vendidos, una saga
cinematográfica que ha recaudado 2.560 millones y la histeria fan
adolescente. Después, la necesidad de redefinirse de nuevo ante tal
fenómeno.
"Se convirtió en algo muy serio, porque la gente me estaba leyendo y
viendo. Así que 'The Host (La huésped)' fue mi vía de escape a esa
primera vía de escape, para volver a ser yo misma y no en lo que la
gente me había convertido al leerme", confiesa.
El libro se publicó en 2008, pero la película, dirigida por Andrew
Niccol ("Gattaca"), llega ahora a las pantallas de todo el mundo.
"El primer amor de 'Crepúsculo' me llevaba inevitablemente a la
adolescencia, a personajes de 16 o 17 años, que es cuando te rompen el
corazón por primera vez. Esta historia habla sobre todas las formas de
amor que nos rodean: amor a la comunidad, a nuestros hijos, a nuestros
compañeros y cómo eso nos cambia a nosotros mismos. Es un sentimiento
más maduro", afirma.
Naturaleza humana
"The Host (La huésped)" nació para contestar a una pregunta de Meyer.
"Estaba interesada en la idea de si era posible la paz mundial.
¿Podremos todos llegar a entendernos algún día? Tal y como es la
naturaleza humana creo que tendríamos que dejar de ser humanos,
deshacernos de esas emociones por las que moriríamos, erradicar el
sentimiento para que todos conviviéramos en paz. ¿Nos compensaría ese
sacrificio?", se cuestiona.
La traducción de estas dudas metafísicas se encarna en Melanie
Stryder (interpretada por Saoirse Roman), una de las últimas
supervivientes sobre una Tierra en la que almas alien han tomado los
cuerpos humanos y que, cuando finalmente es "invadida", su resquicio de
mujer convive con el alma extraterrestre.
"Me gustó la idea de meter los dos personajes principales en un mismo
cuerpo: Una de ellas siempre quiere hacer lo que está bien, tiene
sentido del sacrificio personal. La otra es una superviviente, hace lo
que sea para conseguir lo que quiere y no es tan sacrificada. Eso
representa nuestra mejor cara y nuestra peor cara, y todos tenemos las
dos", describe Meyer.
Puesto que aspira a hacer una trilogía, en esta primera parte se
sientan los mimbres de la dicotomía: la mujer se enamora de Jared
(interpretado por Max Irons) y la alienígena de Ian (interpretado por
Jake Abel).
Los ejes de su todavía joven obra reaparecen en "The Host (La
huésped)", como la obsesión por el trato al diferente, la coexistencia
de diferentes especies y la pureza del amor. Romanticismo a la antigua
revestido de futurismo. "No soy nada cínica escribiendo, soy más cínica
en la vida real", explica.
La ciencia ficción le retrotrae a su infancia en la América profunda,
cuando veía a su padre leer los libros de Orson Scott Card, como ella
perteneciente a la iglesia mormona. Y ya entonces, la pequeña Stephenie
escondía dentro de sí un espíritu creador.
"Siempre he tenido las historias, desde que era pequeña, así que no
estoy sorprendida de que no se me acaben las historias que contar. Es el
momento en el que quieres transcribirlas cuando surge el reto, pero
podría escribir eternamente si tuviera tiempo infinito", comenta.
"Es verdad que escribir es un trabajo solitario. Pero por otro lado,
siempre que escribo, acabo creando personajes que me hacen compañía",
sentencia.