A pesar de que el aumento de peso durante el embarazo es normal y esperado, Kim Kardashian confesó que no ha sido muy grato el periodo que toda mujer está dichosa de vivir.
En una entrevista con “Extra”, la diva de reality comentó el revuelo que han causado sus comentarios acerca de el peso que ha adquirido y la exagerada importancia que los medios de comunicación le han dado:
“Hubo dos portadas de revistas la semana pasada que decían que yo había subido 45 kilos. Cuando la ví, pensé ‘¡han sido sólo 27 kilos!”
Kardashian insistió que el aumento de peso no es algo que a ella le preocupa:
“Ni siquiera me molestaría si ganara todo ese peso [los 45 kilos]. Realmente no me molestaría!”
Aún cuando le han pasado bellas situaciones con el bebé que espera, Kim admite que ha tenido que restringirse en cuanto a dulces y comida chatarra, siendo ésto un trabajo arduo y cansador:
“Estar embarazada, no me gusta nada de eso. Todo lo que comemos es zanahorias, apio,barras de proteína, ni azúcar ni gluten. Estoy esperando el momento en que alguien me lleve al McDonalds y a Taco Bell. Eso no va a suceder para mí y estoy un poco triste por eso”