La cantante Alicia Keys se encargó de interpretar el himno nacional estadounidense antes del inicio del Super Bowl XLVII entre los Ravens de Baltimore y los 49ers de San Francisco.
Keys interpretó uno de los temas que han causado más polémica en las
últimas semanas, luego que su colega, la cantante Beyoncé, lo hizo
usando ‘playback’ (una pista) durante la ceremonia de toma de posesión
del presidente Barack Obama en su segundo mandato al frente del gobierno
de Estados Unidos.
Esta vez Keys lo hizo con un arreglo estilo jazz que provocó
que los asistentes presentes en el Mercedes Benz SuperDome, de Nueva
Orleans, vitorearan y aplaudieran a la cantante, concluida su
participación.
Keys se presentó sentada al piano con un vestido marrón sin mangas,
cantando con una voz que en momentos sonaba ronca, pero que en general
causó buena impresión entre los asistentes a la final de la NFL, que
pudieran percatarse de que esta vez el himno sí fue interpretado en
vivo, alejando todo tipo de sospechas.